EL MUNDO
› DESPUES DE LA TORMENTA DE NIEVE
Tiros contra la colimba
La tormenta de nieve que se llevó la vida de al menos 26 conscriptos –otros 19 siguen desaparecidos– desató en Chile un intenso debate político en torno del servicio militar obligatorio. Dirigentes del oficialismo y de la oposición coincidieron en reclamar el fin de la conscripción obligatoria y apuntaron al jefe del ejército, Juan Emilio Cheyre, y al ministro de Defensa, Jaime Ravinet, por su responsabilidad en la tragedia.
“Es momento para que en Chile se termine el Servicio Militar Obligatorio, se modifique la doctrina militar, esa de hacer las cosas con la mayor dureza posible”, declaró el precandidato a la presidencia de Chile por la izquierda, Tomás Hirsch, del Partido Humanista. Por su parte, la ahora ex precandidata presidencial democristiana y ex canciller Soledad Alvear también propuso eliminar la obligatoriedad de la conscripción. Además propuso aumentar el contingente femenino, fortalecer los incentivos a los jóvenes y mejorar las remuneraciones para los reclutas. En un sentido similar se pronunció el precandidato de la derechista Renovación Nacional (RN), Sebastián Piñera, para quien “llegó el momento de establecer un servicio voluntario”. Piñera dijo que deberían aumentarse las remuneraciones de los conscriptos a 140 dólares; actualmente no superan los 28.