EL MUNDO › TELESUR, IMPULSADA POR
HUGO CHAVEZ, NACE EN GUERRA CON EE.UU.
Simón Bolívar contra el Imperio por TV
La señal de la nueva televisora multiestatal Telesur saldrá este domingo por toda América latina, en medio de una anunciada “guerra electrónica” entre el presidente Hugo Chávez y Estados Unidos, que aprobó una enmienda para contrarrestar las transmisiones del canal. Con una señal de seis horas diarias disponible en satélite, la televisora, un proyecto impulsado por Venezuela, Argentina, Cuba y Uruguay, nacerá en Caracas con el propósito de “ver con los propios ojos las realidades en América latina”, aseguró Jorge Botero, director de información de la empresa. Venezuela advirtió que se verá “obligada a actuar” si Estados Unidos concreta la anunciada emisión de una señal televisiva hacia territorio venezolano, ya que violaría las leyes de telecomunicaciones de ese país.
El gobierno del presidente Hugo Chávez comenzará a emitir el día del natalicio de Simón Bolívar, mañana 24 de julio, la señal satelital Telesur, que en la Argentina podrá verse el próximo domingo por el estatal Canal 7, entre las 13 y las 13.15 horas. “Telesur está listo para este domingo con un segmento disponible por numerables canales de cable de la región, cargado de noticias, crónicas, reportajes, documentales y cine; son seis horas que se repetirán cuatro veces al día”, dijo Botero. “Estas emisiones saldrán continuamente hasta octubre, cuando comiencen a emitirse los noticieros”, agregó el director de origen colombiano. La señal arranca en medio de la polémica entre su promotor, Hugo Chávez, y la Cámara de Representantes del Congreso de Estados Unidos, que el miércoles aprobó una enmienda para dar luz verde a la transmisión de imágenes y sonidos a Venezuela, a fin de contrarrestar el supuesto “antiamericanismo” de Telesur.
Chávez fustigó la iniciativa legislativa y anunció estar dispuesto a emprender una “guerra electrónica” si Estados Unidos emite señales para neutralizar a la televisora, cuya señal de prueba comenzó hace dos meses.
“Si el gobierno de Estados Unidos se atreviera a tomar alguna acción, cualquiera que ella sea, que lance señales muy potentes, entonces sería una guerra electrónica”, subrayó. El presidente advirtió que Washington se “arrepentirá” si decide atender la enmienda y comparó la acción de la Cámara con la emisora Radio Martí, que busca desde 1985 enfrentar con ondas radioeléctricas al régimen cubano de su aliado Fidel Castro.
“Si Fidel ha podido neutralizar la señal de Radio Martí, aquí también neutralizaremos cualquier señal”, aseguró el miércoles el gobernante, quien negó que Telesur sea un proyecto personal.
También la viceministro de la Cancillería venezolana, María Pilar Hernández, en el marco de la XXV reunión del Grupo Río, declaró: “Queremos creer todavía que la sensatez del Senado de los Estados Unidos, por encima de lo resuelto por la Cámara baja, va a impedir que se tome una medida absurda que violaría las leyes de telecomunicaciones de Venezuela”. Por su parte, el vicepresidente José Vicente Rangel aseveró que la enmienda demuestra “una gran victoria del canal sin haber aparecido públicamente”, mientras la mayoría oficialista del Parlamento aprobó un acuerdo de repudio contra la medida, promovida por el congresista republicano Connie Mack. “Esto demuestra la gran ignorancia que persiste en la política y la sociedad americana sobre las realidades que ocurren en América latina”, comentó Botero. La Televisora del Sur (Telesur) también fue objeto de críticas por parte del vicecanciller colombiano Camilo Reyes y la prensa colombiana, pues rechazaron que en sus promociones se divulgaran imágenes del líder de las FARC, Manuel Marulanda, alias Tirofijo.
Estas críticas fueron rechazadas por Chávez y su ministro de Información, Andrés Izarra. Izarra y el director general de la televisora, el uruguayo Aram Aharonian, también rechazan reiteradamente que el canal sirva como órgano propagandístico de Caracas y La Habana en el continente. “Telesur no es un arma para impulsar modelos o procesos políticos. Pero Aharonian había dicho en marzo pasado en Montevideo que el cometido del canal era “dar la pelea ideológica en el plano masivo”.