EL MUNDO
› EL HIJO DEL PREMIER ISRAELI FUE ACUSADO FORMALMENTE
El Sharon que enfrenta cargos
› Por Eric Silver *
Omri Sharon, el hijo mayor del primer ministro israelí y su jefe de campaña, enfrenta cinco años de prisión luego de ser acusado de financiar ilegalmente la exitosa campaña de su padre en 1999 por el liderazgo del Likud y, más tarde, para ser mandatario.
Se cree que el parlamentario de 41 años habría reunido más de seis millones de shekels –más de 1,3 millón de dólares–, siete veces el límite legal, y la mayoría de donaciones del extranjero. Se dice que habría canalizado grandes sumas a través de empresas poco importantes para los proveedores y las empresas de servicios. A otras empresas se les pedía, supuestamente, que emitieran recibos falsos.
Omri Sharon fue acusado en los tribunales de Tel Aviv ayer por fraguar documentos corporativos, perjurio y falta a la verdad. Los fiscales rechazaron una propuesta para acordar que lo hubiera salvado de ir a la cárcel.
La acusación humillará a Ariel Sharon, que está peleando por su vida política después de forzar la evacuación de 25 asentamientos de Gaza y Cisjordania en contra de los deseos de la mayoría de su partido. Se espera que Benjamin Netanyahu, que renunció como ministro de Economía en protesta contra la desconexión, anuncie su candidatura para liderar el Likud esta semana. Los últimos sondeos sugieren que podría ganarle al mandatario de 77 años en las primarias previas a la elección nacional del año que viene. Menahem Mazuz, el procurador general, había decidido anteriormente no presentar cargos en contra del primer ministro, que asegura que no sabía nada sobre cómo se recolectaron los fondos. Sin embargo, analistas israelíes especulaban ayer con que el juicio de su hijo sacaría a la luz nueva evidencia que podría persuadir a los fiscales a repensar el tema.
Omri Sharon se despidió de su inmunidad parlamentaria. Explicó que prefiere argumentar ante el tribunal que las restricciones hacían imposible dirigir una campaña legal. “Los expertos piensan que un gasto razonable para una campaña así es de alrededor de 10 veces más lo permitido por ley”, aseguró. “Esta norma nunca fue utilizada y yo soy el único que ha sido acusado de haberla violado.”
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: L. C.