EL MUNDO
› ESPAÑA ENDURECE OTRA VEZ SU LEY
Menos ilegales, coño
Un día después de que el Parlamento italiano diera media sanción a un proyecto que restringe la llegada de inmigrantes, España dio a conocer que el gobierno estudia una nueva reforma de la Ley española de Extranjería. El argumento lo dio el vicepresidente del gobierno y ministro del Interior, Mariano Rajoy, que aseguró que hay que ser “contundente” con la inmigración ilegal y que el gobierno español quiere que la UE establezca como prioridad “básica” la política migratoria común. El premier José María Aznar, en tanto, tildó de “demagogos” e hipócritas” a los políticos que no acuerdan con las reformas inmigratorias. “Los países tienen una capacidad de acogida limitada.”
Desde Sevilla, Rajoy expresó que España desea avanzar en una legislación común con el resto de los países europeos: hay que plantearse “si nuestras leyes son menos severas que las del resto de países” de nuestro entorno. La ley de inmigración será el principal tema de la cumbre europea que tendrá lugar en Sevilla los días 21 y 22. De acuerdo con Rajoy, la inmigración será en los próximos años el fenómeno “más importante”: se va a necesitar “mucho equilibrio, mucha sensatez y sobre todo una política común”. Aznar, que defendió la regulación de los flujos migratorios como una política necesaria, aunque no “cómoda”, destacó que someterá a votación de los Quince cuestiones relacionadas con el derecho de asilo y el estatuto de refugiado, un plan de acción común contra la inmigración ilegal y un control de las fronteras exteriores de la Unión.
Y se despachó contra los políticos “hipócritas” y “demagogos” que aseguran que “es lo mismo la inmigración legal que la ilegal”, y que en lugar de afrontar la situación, “miran para otro lado”. “Es un error gravísimo y, al final, se paga un precio más caro por no afrontar los problemas”, advirtió Aznar.