Por Graham Usher y Brian Whitaker
Desde Jerusalén

Dos militantes palestinos mataron a cuatro soldados israelíes ayer en un ataque que puede marcar el fin de un cese de fuego que apenas lleva tres semanas. Los guerrilleros, que pertenecían al movimiento islamista Hamas, pero estaban vestidos con los uniformes de policía de la Autoridad Palestina, atravesaron el cerco de alambre de la frontera de la Franja de Gaza poco después del amanecer y atacaron un puesto del ejército israelí con granadas y armas automáticas. Cuatro soldados murieron, incluyendo un comandante de compañía, todos de una unidad voluntaria beduina. Uno de los atacantes palestinos murió en el lugar y tropas israelíes le dispararon al otro, matándolo después de una persecución.
Las brigadas Ezzedin al-Qassam (el brazo militar de Hamas) se atribuyeron la responsabilidad por el asalto, echando otra sombra sobre los esfuerzos internacionales y de Estados Unidos para lograr una tregua duradera después de más de 15 meses de violencia. En una declaración enviada por fax, Hamas dijo que la captura por parte de Israel la semana pasada de un barco que supuestamente transportaba armas para la Autoridad Palestina era el principal factor detrás del ataque al puesto del ejército en Kerem Shalom, cerca de la frontera con Egipto.
El ataque de ayer fue el más serio desde que el 16 de diciembre Yasser Arafat pidió terminar con los ataques a los israelíes. Hamas aceptó suspender sus ataques dentro de Israel después del pedido del líder palestino. El gabinete de seguridad interno de Israel convocó a una sesión de emergencia. Este “ataque asesino sobre civiles y soldados dentro del territorio israelí... prueba que la Autoridad Palestina no ha hecho lo suficiente para detener la violencia,” dijo Avi Pazner, un vocero del gobierno israelí. “Por supuesto que no permaneceremos indiferentes.” Después de la reunión, la televisión israelí citó al premier Ariel Sharon como diciendo que Israel mantendría el principio de represalia después de cada ataque palestino. El ejército israelí inicialmente dijo que ambos hombres eran miembros de las fuerzas de seguridad de la Autoridad Palestina, quien a su vez negó la acusación.
Los asentamientos judíos dentro de Gaza y los kibbutzim y pueblos israelíes fueron puestos inmediatamente en alerta máxima, mientras las fuerzas de seguridad palestinas evacuaron sus bases anticipándose a las represalias israelíes. Fuentes palestinas informaron que existía una concentración de fuerzas israelíes de tanques, blindados y tropas de infantería cerca del aeropuerto internacional de Gaza de la Autoridad Palestina. A pesar de las declaraciones de Hamas de que el ataque fue una represalia por la “piratería” de Israel al interceptar el embarque de 50 toneladas de armas en el Mar Rojo, pueden existir otros motivos. Las tensiones han crecido recientemente entre la Autoridad Palestina y Hamas en Gaza, estirando al límite su discreto acuerdo sobre un cese de fuego. El martes, dos escolares palestinas fueron heridas en el campo de refugiados de Shati de Gaza, cuando los hombres de seguridad de la Autoridad Palestina trataron de arrestar a un activista de Hamas. Y ayer, una importante batalla armada erupcionó en el mismo lugar después de la exitosa captura del otro hombre de Hamas por la Autoridad Palestina. Un vocero de Hamas en Gaza describió los arrestos como “un crimen destinado a comenzar la guerra civil (palestina)”.
El hecho que el último ataque fuera anunciado primero por Hamas desde Beirut puede indicar una ruptura en sus jerarquías entre el liderazgo de “afuera” de Hamas, que desde hace tiempo defiende la resistencia armada contra Israel y el liderazgo de Gaza, que adoptó una postura mucho más conciliatoria hacia Arafat. Cualquiera sea el motivo, el ataque ha colocado al principal liderazgo palestino en un nuevo aprieto, aumentando más la presión que soportaba bajo las acusaciones de Israel de su “responsabilidad directa” en el asunto de contrabando de armas. La Autoridad Palestina condenó el ataque a la base israelí, temiendo que fuera usado como excusa por Sharon “para continuar la escalada y el sitio contra nuestro pueblo”. También se comprometió a realizar una investigación sobre el ataque. Javier Solana, el jefe de política de la Unión Europea, dijo que el ataque ocurrió “en un momento en que todos notamos una notable reducción de la violencia y un serio esfuerzo para luchar contra el terror”.

De The Guardian de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère