Desde Mombasa

El capitán estadounidense que cayera prisionero de los piratas somalíes hace seis días fue liberado ayer en una operación que costó la vida a tres de sus captores. Según informes de las tropas en el área, un cuarto pirata estaría detenido a bordo del destructor norteamericano “USS Bainbridge”.

El dramático rescate llegó en momentos en que el bote salvavidas en donde se encontraba el capitán Richard Phillips junto con algunos de sus captores –desde el fallido intento de secuestro del carguero “Maersk Alabama” el pasado miércoles– se acercó demasiado a la costa somalí, algo que la Marina norteamericana no estaba dispuesta a permitir, suponiendo que las negociaciones podrían complicarse si los piratas tocaban tierra. De haber llegado a la costa, el capitán Phillips se hubiera reunido con seguridad con los otros 285 rehenes que aún permanecen en el interior de Somalía, junto con otras 15 embarcaciones.

Al enterarse de la liberación, la tripulación del “Alabama” festejó con todo, lanzando bengalas al aire desde la cubierta del barco e izando una bandera estadounidense a bordo, todo ello desde el puerto de Mombasa, en Kenia, donde se encontraban a salvo desde que el capitán Phillips se ofreciera como rehén en su lugar hace una semana. “Estamos felices. Es un héroe”, gritó un marinero desde el puerto. Desde Estados Unidos, una vocera de la familia expresó el alivio de los familiares. “Estas son unas felices Pascuas. Todos nuestros deseos se cumplieron.”

Los piratas, quienes habían pedido un salvoconducto hasta tierra firme y un rescate de dos millones de dólares, estuvieron negociando con oficiales estadounidenses a través de teléfonos satelitales, permitiendo a los agentes del FBI hablar con Phillips una vez al día, para probar que el capitán de Vermont, de 53 años, permanecía aun con vida.

Durante las horas previas al rescate, cinco barcos de guerra norteamericanos y varios helicópteros sobrevolaron a los piratas varias veces. A medida que el bote se acercaba a la costa, la opción militar cobró fuerza.

Luego de su rescate, el capitán fue trasladado a bordo del anfibio estadounidense USS Boxer, donde se encuentra descansando tras pasar algunos estudios médicos de rutina. Ahora será trasladado a una base estadounidense en el vecino Djibouti. El Departamento de Justicia informó desde Washington que todavía está estudiando qué cargos presentar contra el somalí.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.