El conocido cineasta Spike Lee dijo que “la mayoría de los norteamericanos está en contra de la guerra, pero finalmente habrá guerra” y agregó, con pesimismo, que “ni siquiera el Papa podrá detenerla”. Lee, que acaba de presentar en el Festival de Berlín su último filme, 25th Hour, participó el último sábado de una marcha antibélica por las calles de Roma. “Es fantástico que la gente de todo el mundo se movilice de esta manera”, sostuvo Lee, quien admitió que en Europa hubo una mayor movilización que en Estados Unidos. Sin embargo aseguró que “la mayor parte de los ciudadanos estadounidenses está contra la guerra, aunque al final habrá guerra”. Spike Lee admitió que le impresiona que Colin Powell, que es de origen jamaiquino, y Condoleeza Rice, que es afroamericana como él, sean dos protagonistas clave de la política intervencionista estadounidense. “Es una lástima y pienso sobre todo en Powell, que es un hombre inteligente. Fue la voz de la razón dentro de la administración estadounidense ya que si hubiera sido por (el secretario de Defensa) Donald Rumsfeld ya estaríamos en guerra desde hace rato”.