La agencia de calificación financiera estadounidense Moody’s redujo la nota soberana de Brasil, aunque mejoró su perspectiva, en un nuevo indicador de la crisis que atraviesa la primera economía latinoamericana. La nota de la deuda brasileña cayó de Baa2 a Baa3, último escalón con grado de inversión, a un paso de caer en categoría especulativa, indicó Moody’s en un comunicado. Para la calificadora, los decepcionantes resultados económicos, el creciente gasto público y la falta de voluntad en el gobierno de la presidenta Dilma Rousseff para implementar reformas no parecen indicar un alivio al peso de la deuda. “Ese escenario impedirá a las autoridades alcanzar excedentes primarios suficientemente altos para detener y revertir la tendencia al alza de la deuda este año y el próximo”, indicó Moody’s. Sólo algunas fortalezas, como la habilidad para resistir choques externos y una economía diversificada, impiden una peor nota, apuntó. Según la agencia norteamericana con sede en Nueva York, las fortalezas de Brasil protegen suficientemente la hoja de balances del gobierno de choques durante el período de ajustes y recuperación para mantener una nota aún apetecible para los inversionistas. “Sin embargo, mucho queda en la capacidad de las instituciones brasileñas para lograr los objetivos fiscales y monetarios, y su habilidad para restaurar la confianza de los inversionistas y estimular el crecimiento”, agregó la agencia.