Sáb 10.09.2005

EL MUNDO • SUBNOTA

Pasen y vean los terceros mundos que existen hoy en Estados Unidos

Aprovechando las desigualdades evidenciadas por el huracán Katrina, la ONU contraatacó ayer a EE.UU. con un durísimo documento que denuncia que partes de ese país son tan pobres como el Tercer Mundo. Es a una semana del 60º aniversario de la organización.

› Por Paul Vallely *

Partes de Estados Unidos son tan pobres como el Tercer Mundo, según un impactante informe de las Naciones Unidas sobre desigualdad global. Afirmaciones de que las inundaciones de Nueva Orleans han desnudado un incremento en la división racial y económica en los Estados Unidos han sido rechazadas hasta ahora por el establishment político como retórica emocional. Pero el informe de ayer de las Naciones Unidas provee pruebas estadísticas, que para muchos –más allá de aquellos afectados por las consecuencias del huracán Katrina– el gran Sueño Americano es una pesadilla en marcha.
El documento constituye un punzante ataque a las políticas interna y externa de Estados Unidos, en un contraataque contra movidas de Washington para socavar la conferencia de la semana que viene del 60º aniversario de la ONU, que será el encuentro más grande de líderes en la historia. El Informe sobre Desarrollo Humano anual normalmente se enfoca en el Tercer Mundo, pero la edición 2005 analiza desigualdades en provisión de salud dentro de los Estados Unidos como parte de una investigación sobre cómo la desigualdad mundial está demorando la erradicación de la pobreza. Revela que la tasa de mortalidad infantil ha crecido en Estados Unidos en los últimos cinco años –y ahora es igual a la de Malasia–. Los niños negros estadounidenses tienen el doble de probabilidades que los blancos de morir antes de su primer año de vida.
El informe está destinado a irritar a la administración Bush, ya que provee municiones a los críticos que han declarado que el fiasco que siguió al huracán Katrina muestra que Washington no se interesa por los niños negros y pobres norteamericanos. Pero el documento de 370 páginas es tan crítico de las políticas estadounidenses contra la pobreza en el exterior como en la esfera local. Y, en un lenguaje inusualmente franco, acusa a Estados Unidos de tener “una estrategia militar demasiado desarrollada y una estrategia para la seguridad humana subdesarrollada”. “Hay una necesidad urgente de desarrollar un marco de seguridad colectivo que vaya más allá de respuestas militares al terrorismo”, continúa. “La pobreza y la crisis social son componentes centrales de la amenaza a la seguridad mundial.” El documento, que fue escrito por Kevin Watkins, el anterior jefe de investigación de Oxfam, será visto como el round número dos en la batalla entre las Naciones Unidas y los Estados Unidos, que considera a la comunidad mundial como una traba innecesaria en sus intereses y acciones estratégicas.
El mes pasado, John Bolton, nuevo embajador estadounidense en la ONU, presentó 750 enmiendas al borrador de la declaración de la cumbre de la semana que viene para fortalecer las Naciones Unidas y revisar el progreso hacia sus Metas del Desarrollo del Milenio para reducir a la mitad la pobreza mundial para el 2015. El informe publicado ayer es un claro desafío a Washington. La administración Bush quiere reemplazar las soluciones multilaterales a problemas internacionales por un orden mundial en el cual Estados Unidos hace lo que quiere en una instancia bilateral.
“Esta es la ONU saliendo con toda su artillería”, dijo un funcionario de las Naciones Unidas. “Significa que, incluso si tenemos un secretario general inhabilitado después del Informe Volcker (sobre el escándalo “petróleo por alimentos”), el resto de la organización no aceptará el programa bilateral de Estados Unidos.”
El conflicto sobre la pobreza mundial se centra en la política estadounidense de promover crecimiento y liberalización comercial sobre la hipótesis de que esto generará riqueza que se derramará a los pobres. Pero esto no impedirá la muerte de niños, dice la ONU. El crecimiento sólo no reducirá la pobreza mientras a los pobres les sean negados un acceso completo a salud, educación y otras provisiones sociales. Entre los pobres del mundo, la mortalidad infantil está cayendo a menos de la mitad del promedio mundial. Abordar ese problema significa abordar el problema de la desigualdad –un mensaje al cual John Bolton y sus compañeros neoconservadores estadounidenses son profundamente hostiles–.
India y China, dice la ONU, han sido muy exitosos en la creación de riqueza, pero no han permitido a los pobres participar en el proceso. Un rápido descenso en la mortalidad infantil, por lo tanto, no se ha materializado. Efectivamente, cuando se trata de reducir la muerte infantil, India ahora ha sido alcanzada por Bangladesh, que está creciendo a sólo un tercio de su ritmo.
La única forma de erradicar la pobreza, dice, es abocarse a las desigualdades. A menos que eso sea hecho las metas de desarrollo del milenio nunca serán alcanzadas. Y 41 millones de niños morirán innecesariamente en los próximos 10 años.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Virginia Scardamaglia.

Nota madre

Subnotas

  • Pasen y vean los terceros mundos que existen hoy en Estados Unidos
    › Por Paul Vallely *
  • Katrina, el nombre del 11-S
    › Por Andrew Buncombe *
    Desde Washington

(Versión para móviles / versión de escritorio)

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS rss
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux