México es uno de los países latinoamericanos que más lejos se encuentran de Argentina. No sólo en distancia, sino también en política. Sin embargo, las relaciones comerciales entre ambos países están creciendo. Argentina es el sexto socio comercial latinoamericano del país dirigido por Vicente Fox, y a principios de este mes se firmaron nuevos acuerdos de complementación económica. Los analistas coinciden en que las relaciones podrían mejorar si el candidato de centroizquierda Andrés Manuel López Obrador gana las elecciones presidenciales el próximo 2 de julio.

México y Argentina no mantienen relaciones estrechas por varias razones. Una de ellas es la distancia. Pero la causa más importante es la creciente vinculación de México con Estados Unidos. “El actual gobierno de México levanta una bandera de alineamiento incondicional con Estados Unidos”, explicó a Página/12 el experto Atilio Boron. Esta fue una de las razones por las que el presidente Fox y Néstor Kirchner han tenido encontronazos fuertes. Uno de ellos fue el de la Cumbre de las Américas de Mar del Plata el año pasado, donde un hubo un ida y vuelta de declaraciones fuertes. Entre ellas, Kirchner le dijo a Fox “que se ocupara de los asuntos de México”. Otra de las causas de la tibia relación entre los dos países es una falta de bases para establecer acuerdos comerciales importantes, ya que tanto México como Argentina son fuertes en el sector agrícola. Sin embargo, debido al interés mexicano de acercarse al Mercosur, la relación comercial está empezando a despegar.

Si bien no son socios privilegiados, los acuerdos entre México y Argentina están creciendo y prometen mucho. Una muestra de esto es la firma de una ampliación del Acuerdo de Complementación Económica a principios de este mes. Dicho convenio aumenta el número de productos que estarán libres de aranceles, con el cual se espera duplicar, en cuatro o cinco años, el intercambio comercial. La mayor parte de exportaciones de Argentina al país centroamericano son los automóviles y los combustibles. Por su parte, México exporta teléfonos celulares y, al igual que Argentina, vehículos. “Hay mucho potencial comercial que hasta ahora no se estaba aprovechando”, explicó a este diario Cecilia Barrios Baron, directora de América del Norte y Asuntos Hemisféricos de la Cancillería. Además de las exportaciones e importaciones, en nuestro país son importantes las inversiones de capitales mexicanos, la mayor parte concentradas en las telecomunicaciones.

La magnitud de las inversiones y el intercambio entre ambos países no se modificaría con un cambio de gobierno en México. “La elección de un nuevo presidente no va a cambiar el rumbo de la relación comercial, por el interés que ésta despertó en los sectores privados de Argentina y de México”, indicó la funcionaria Barrios Baron. “Las inversiones son de actores privados, por lo tanto esa esfera no va a cambiar”, coincidió el analista internacional Pedro Brieger.

La victoria de López Obrador, el candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD), sería sin embargo importante para la extensión del eje de centroizquierda en Latinoamérica. “La afinidad ideológica es importante y hace a la relación entre los países”, indicó Brieger. “Kir-chner se sentiría más cómodo con un gobierno del PRD”, agregó el analista. “Si gana López Obrador se abriría un espacio para una mayor consolidación de la relación entre México y Argentina”, indicó por su parte el politólogo Boron, aunque fue cauto al indicar que no hay que hacerse “grandes ilusiones”, ya que la tendencia de centroizquierda mexicana es más atenuada. Además, la situación en México está muy limitada por el Tratado de Libre Comercio (TLC) que tiene con Estados Unidos. “Es difícil que el candidato del PRD pueda hacer cambios importantes”, afirmó Boron, al tiempo que señaló que Argentina “debería explorar alguna mejora en la relación con ese país”.

Informe: Virginia Scardamaglia.