Tras un día cargado de tensiones, con amenazas veladas y acusaciones cruzadas, las entidades agropecuarias propiciaron el encuentro con las autoridades que viene demorado desde que se levantó el lockout. En una nota firmada por las cuatro entidades que llevaron adelante la medida de fuerza y dirigida a la Presidenta de la Nación, formalizaron el pedido de audiencia “a la mayor brevedad posible”, con el objeto de “contribuir a elaborar el plan estratégico para el sector agropecuario y a consolidar una sociedad sin exclusiones, con igualdad de oportunidades y con equidad social”.

No es poco, después de una jornada en la que hasta un dirigente rural amenazó con retomar de inmediato las medidas de fuerza si el encuentro se seguía demorando, que las cuatro organizaciones adoptaran no sólo un lenguaje moderado, sino incluso recogiendo el discurso elegido por las autoridades en la última semana de conflicto. Los presidentes de Confederaciones Rurales Argentinas, Sociedad Rural, Federación Agraria y Coninagro rematan la nota reiterando el pedido de audiencia para “restablecer un diálogo sincero y profundo”.

En la corta misiva que recibió anoche Cristina Fernández, pocas horas después de retomar la actividad tras su regreso de Francia, se denota nuevamente la unidad de criterio entre las entidades que no se había traslucido en las declaraciones conocidas a lo largo del día. Pedro Apaolaza, presidente de Carbap (principal entidad de segundo grado de CRA), advirtió durante la mañana, tras señalar que los productores siguen “con un pie en el campo y otro en la ruta”, que “si no hay avances concretos en las próximas horas” en cuanto al diálogo, “no hay por qué esperar treinta días para volver a las medidas de fuerza”.

Expresiones no menos duras formuló el titular de la Sociedad Rural de Córdoba, José Ignacio Romero, también enrolada en CRA, al salir de un encuentro con el gobernador Juan Schiaretti. Este había ofrecido a las entidades agropecuarias de la provincia adelantar el dinero de los reintegros a pequeños productores una vez que salga la resolución de Economía. “No le creemos nada a Schiaretti, no entendió el reclamo, que es la eliminación de las retenciones móviles, no que nos den ningún reintegro”, se endureció el dirigente local.

Estas declaraciones contrastaron claramente con las expresiones de Eduardo Buzzi, presidente de Federación Agraria, quien sostuvo que la tregua de treinta días “no corre peligro”. Desde Rosario, donde participó del encuentro del Consejo Directivo de su organización, recordó que el sector agropecuario “se encuentra en estado de alerta y movilización”. “No creo que peligre la tregua, pero inquieta que se demore tanto la reunión con el Gobierno; somos personas de palabra”, indicó Buzzi en tono conciliador.

“No vamos a llegar al extremo de bloquear puertos porque hay una tregua, pero permanecemos en estado de alerta y movilización (...). Nosotros sostenemos que los pequeños y medianos productores deben volver a tener viabilidad. Por eso, no es un tema para diferir tanto en el tiempo. Entre los productores hay inquietud. Esperemos que esta semana tengamos novedades y que la gente comience a tranquilizarse. Se necesita perspectiva para sostener el trabajo”, concluyó.

Confederaciones Rurales convocó para hoy a las trece entidades que lo integran para analizar la falta de respuestas oficiales. El Consejo Directivo, que preside Mario Llambías, evaluará la situación generada por el “silencio oficial” que se observa desde la finalización del lockout, creando un clima de malestar que, según señalaron dirigentes del sector, “se está profundizando”. Dicho estado de ánimo se vio reflejado en las declaraciones de ayer de Pedro Apaolaza y de José Romero.

La única expresión oficial estuvo en boca del jefe de Gabinete, Alberto Fernández, quien pidió “serenidad” a las entidades agropecuarias. “Ya nos vamos a reunir”, prometió, exhortando a “desdramatizar” la situación y reducir las ansiedades. Indicó que no sonaba “feliz ni razonable” volver al paro, como amenazó Apaolaza, puntualizando que “no tiene mucho sentido seguir poniéndole voces altisonantes al tema, lo mejor es serenarnos. Ya vamos a reunirnos y a ponernos a trabajar. Hay que esperar, organizarnos y, después, sentarnos y ver cómo empezamos esa tarea”, dijo como toda referencia el jefe de ministros.

Ya retornada Cristina Fernández, desde París, y Martín Lousteau, ministro de Economía, desde Miami, se especulaba anoche en que habría un encuentro entre ambos y Alberto Fernández para evaluar la propuesta que se le haría en las próximas horas a las entidades del campo. Sin embargo, esta reunión no fue confirmada. En los últimos días, el equipo económico ha venido trabajando en el diseño final de las resoluciones para el reintegro a medianos y pequeños productores de la diferencia entre las retenciones móviles y las vigentes hasta el 10 de marzo para soja y girasol. También habrá una compensación por distancia hasta los puertos de salida de las exportaciones. Las entidades reclamaron precisiones sobre su implementación. Es lo que está pendiente. Es lo que se impondrá como primer punto de la agenda de una reunión que, hasta anoche, seguía sin tener fecha.

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