La visita que realizó ayer la Presidenta a San Martín y el discurso que pronunció en ese municipio del conurbano tuvieron una sintonía nada casual. Tanto el escenario elegido para el acto, una intendencia gobernada por un intendente no PJ –el vecinalista Ricardo Ivoskus, un ex ARI–, como también las palabras que CFK pronunciaría desde el micrófono, habían sido pensadas con un objetivo bastante evidente: dar una señal a los radicales K sobre la continuidad de la Concertación Plural. Además, la idea implícita era responder los dichos del vice Julio Cobos, quien había declarado que votaría de nuevo contra las retenciones móviles (“volvería a actuar de la misma forma”, fue la frase más comentada del mendocino). La Presidenta pareció contestarle con una ratificación de la alianza con los radicales aunque intercaló una frase sobre las confluencias que se producen, o fortalecen, al reconocer al adversario. “Si tengo alguna duda veo quién se pone muchas veces del otro lado y allí, simplemente por asociación, me coloco del otro”, afirmó en lo que fue interpretado como un reproche.

Acompañada por el gobernador Daniel Scioli y los ministros Florencio Randazzo (Interior), Julio De Vido (Planificación) y Graciela Ocaña (Salud), la Presidenta hizo un discurso que exaltó el pluralismo y tuvo algunos guiños al partido radical. “Debemos mirar todo lo que nos rodea y lo que nos pasó. No para lamentarnos o acusarnos, simplemente para saber cuál es el camino acertado en materia de política económica y social. No quiere decir que todos seamos homogéneos, que todos repitamos exactamente la misma marchita o cantemos al unísono”, aseguró. En el acto estuvieron dos intendentes radicales K, Mario Meoni (Junín) y Enrique “Japonés” García (Vicente López). También hubo representantes del intendente Gustavo Posse (San Isidro), otro miembro de la UCR aliado del kirchnerismo. Esas presencias fueron otra prueba de que el oficialismo pretende ratificar el pacto con los radicales K y al mismo tiempo aislar esa alianza de la relación entre CFK y Cobos.

El guiño a la UCR se reflejó a la hora de las citas, cuando incluyó a Arturo Jauretche y a los fundadores de Forja (Fuerza de Orientación Radical para la Joven Argentina). “Junto a Scalabrini Ortiz, Dellepiane y Homero Manzi, Jauretche fue un joven radical que fundó Forja cuando se fueron del radicalismo porque sentían que ya no podían estar en una fuerza que no les había dado respuesta. Ellos también contribuyeron a formar y continuar el movimiento nacional”, dijo. El acto había sido organizado para anunciar la pavimentación de más de 125 cuadras del municipio. Cuando le tocó hablar en su rol de anfitrión, el intendente Ivoskus ratificó públicamente su pertenencia a la Concertación Plural. “Es el espacio al que pertenecemos y con el que estamos identificados porque representa el espíritu, la preocupación por solucionar problemas de la gente más allá del origen partidario”, dijo el vecinalista y ex ARI.

Además de referencias a la coalición partidaria, el discurso de la Presidenta incluyó un capítulo sobre la última Ronda de Doha de la Organización Mundial de Comercio (OMC). En esa reunión en Ginebra, donde la Argentina estuvo representada por el canciller Jorge Taiana, los países desarrollados intentaron que los países emergentes levantaran aranceles a la importación de productos industriales. “Necesitamos que nuestra industria siga desarrollándose para generar más trabajo. Por eso las posiciones que fuimos a defender a la OMC, donde sabemos que las relaciones de fuerza entre los poderosos y los países emergentes son difíciles”, afirmó CFK. “Llevamos como bandera la industrialización del país. No es una postura de cerrarnos al mundo. Al contrario, queremos abrirnos pero no abandonar nuestro proyecto propio de país productor con valor agregado”, subrayó.

En su última aparición pública antes del discurso del titular de la Sociedad Rural, Luciano Miguens (está previsto para hoy a las 11.30, Miguens ya adelantó que tendrá críticas duras al Gobierno), la Presidenta no se privó de hacer algunos pedidos a sectores privilegiados que no nombró pero que asoció con “un país para pocos”. “Creo en una Argentina en la que haya lugar para todos, aún para aquellos que siguen pensando que la riqueza debe ser para unos poquitos. También para esos hay lugar en esta Argentina. Lo único que les pedimos es que dejen construir la Argentina también de los que creemos que podemos estar todos un poco mejor todos los días”, les pidió desde el escenario. Hoy al mediodía, en la inauguración de la Exposición Rural, se sabrá si el pedido surtió algún efecto.