Julio Cobos aterrizó ayer en Miami para participar de la Conferencia Americana 2008 y no desaprovechó el escenario: mientras en los tribunales de esa misma ciudad se ventila el valijagate, disparó contra el ministro de Planificación, Julio De Vido. “Si sabe algo esclarecedor, tiene la obligación de colaborar con la Justicia”, advirtió el vicepresidente y reclamó que “aclare sobre su rol en tan dudoso hecho”.

Las declaraciones de Cobos sobre el escándalo de la valija con los 800 mil dólares que Guido Antonini Wilson quiso entrar a la Argentina volvieron a exhibir la distancia que hoy lo separa de la Casa Rosada. Fueron, además, la frutilla del postre de la frenética agenda que desarrolló en Miami, en lo que constituyó su debut en el plano internacional.

Cobos viajó a esa ciudad invitado a un debate sobre integración regional, organizada por la Universidad Internacional de Florida y el diario Miami Herald. Desde la Presidencia hicieron saber que Cristina Fernández de Kirchner no firmó el decreto con la autorización de los gastos de representación para el viaje de su vice.

Voceros de Cobos minimizaron ese hecho y evitaron las polémicas. “El decreto no era necesario, porque los gastos fueron costeados por el Miami Herald”, afirmaron.

A lo largo de su exposición en la conferencia a la que fue invitado, Cobos analizó la crisis financiera internacional y el rol de la Argentina, la relación del país y el Mercosur con Estados Unidos, el lazo actual con Chile y también planteó su postura sobre la polémica cuestión de la coparticipación federal. Luego de su disertación, Cobos se reunió con asesores para América latina de los candidatos presidenciales John McCain y Barack Obama y con directivos de la firma General Motors.

“No es un problema que sólo debe ser solucionado por los Estados Unidos, también debe ser analizado por la Unión Europea”, manifestó Cobos, en mención con la debacle financiera mundial. En cuanto a la situación de la Argentina, señaló que “el pago al Club de París y la apertura del canje de la deuda para los bonistas que quedaron fuera del canje de 2005 abren buenas perspectivas para el crédito internacional”.

“Poco a poco se irán limando las asperezas entre Argentina y Estados Unidos, porque las relaciones comerciales son muy buenas, lo mismo sucederá con todo el Mercosur”, manifestó también Cobos, acerca del vínculo de la Casa Blanca con el gobierno argentino y con los del resto de los países sudamericanos.

Con respecto a la relación estratégica con Chile, el ex gobernador mendocino afirmó que “vemos la salida al Pacífico como un océano de oportunidades y es la intención de este gobierno perforar la Cordillera en toda su extensión”. Sobre la problemática de la coparticipación federal, aseguró que “en un país federal, tal como lo expresa nuestra Constitución, la sociedad demanda una nueva distribución de recursos”.