El juez federal Julián Ercolini difundió a través del Centro de Información Judicial de la Corte Suprema un comunicado en el que señaló que la causa abierta contra el ex presidente Néstor Kirchner, el ministro de Planificación, Julio De Vido, y otros funcionarios y empresarios está en “estado incipiente” y que por el momento no se prevén detenciones. El texto, poco usual en tribunales, se realizó a raíz de las repercusiones y declaraciones políticas que se produjeron luego de la apertura formal del expediente.

“El modelo republicano garantiza a los magistrados el cumplimiento de la función con imparcialidad, independencia y objetividad, lo cual supone una labor separada de disputas políticas, económicas y sectoriales propias de la coyuntura”, se afirmó en la declaración elaborada por el juzgado que encabeza Ercolini. La pesquisa se originó en una denuncia realizada por la líder de la Coalición Cívica y diez diputados de su partido.

“El 23 de diciembre último –explicó el informe– se formuló un requerimiento de instrucción por parte del fiscal del caso, fecha en la que mediante un proveído jurisdiccional se inició formalmente la causa. El modelo republicano propio de la Constitución de la Nación supone un mandato supremo dirigido a los magistrados del Ministerio Público Fiscal y del Poder Judicial de darle curso a todas las denuncias formuladas salvo supuestos que específicamente veda el Código Procesal penal de la Nación.” Ercolini señaló que “el sentido de la fase preliminar de investigación es el de recolección de pruebas para procurar evidencias que sean válidas, eficaces y congruentes con la hipótesis de la denuncia” y que “el estado incipiente de la etapa de instrucción no supone la adopción de decisiones coercitivas de restricción ambulatoria o de otro tipo”.