Es una sensación, un clima de confianza, y se empieza a notar entre los dirigentes del oficialismo de origen bonaerense. Los más optimistas aseguran que los malos tiempos están quedando atrás y que el kirchnerismo logrará un resultado impensado en la provincia de Buenos Aires. De la mano, ya se sabe, de su alma mater: el propio Néstor Kirchner. “La ola ya pasó, nos golpeó pero seguimos parados. Y nos estamos recuperando bien”, resume uno de los optimistas en diálogo con Página/12. El optimista tiene un alto cargo en la Legislatura, pasado de intendente, es poco adepto a las declaraciones y se jacta de su trato cotidiano con el presidente del PJ. El pesimista es funcionario en la Rosada y también viene de la provincia. Su diagnóstico es más sobrio. “No le podría decir que estamos mejor, pero no estamos peor. Y están pasando cosas buenas. Estamos para empezar a mejorar”, dice. Tanto los optimistas como los pesimistas dan por sentado que Kirchner encabezará la lista del oficialismo. La novedad de estos días es quién podría acompañarlo en el segundo lugar: los últimos rumores señalan al secretario general de la gobernación, José “Pepe” Scioli, hermano del gobernador.

La posibilidad de que Scioli siga a Kirchner en el segundo lugar de la lista de diputados tendría un efecto simbólico para el oficialismo. Esta alternativa permitiría reeditar la fórmula Kirchner-Scioli, que ganó las presidenciales de 2003. La elección que dio inicio al ciclo K se decidió tras el abandono de la fórmula Menem-Romero. Quienes impulsan esta opción argumentan que el apellido de Scioli debe ser visible en la boleta del Frente para la Victoria. Para apuntalar esta opinión, importantes dirigentes de la provincia citan una encuesta que habría realizado Julio Aurelio y que muestra un más que respetable índice de imagen positiva del ex motonauta. La ubicación del hermano menor del gobernador bonaerense en el segundo lugar –hasta hace tiempo se lo mencionaba en el cuarto puesto– también podría obedecer a las rivalidades de palacio que acechan en torno del actual jefe de Gabinete, Sergio Massa.

Intendente de Tigre con licencia en el municipio, Massa nunca dejó de evaluar la posibilidad de regresar a la comuna. Sin embargo, en el oficialismo hay dirigentes que no dudan de su continuidad y lo ubican como segundo de una lista de diputados encabezada por Kirchner. Esa visión es compartida por dirigentes que suelen hablar en privado con el santacruceño, entre ellos diputados e intendentes del conurbano. Según esa lectura, las primeras cuatro candidaturas ya estarían definidas. Los nombres serían Kirchner, Massa, Graciela Ocaña y Pepe Scioli. “Una lista de lujo”, la bautizaron varios hombres del oficialismo que valoran la síntesis que tendrían los cuatro apellidos juntos. “Esta lista nos contiene a todos”, es uno de los argumentos más escuchados.

La sensación de confianza de la que se habla al comienzo de la nota tuvo un importante empujón con el sondeo que Julio Aurelio habría exhibido a varios legisladores bonaerenses hace una semana. En ese estudio sobre intención de voto, cuando la campaña todavía no comenzó, Kirchner cosecha 38 puntos, Francisco de Narváez 25 y Margarita Stolbizer 18. “Con la fórmula Kirchner-Scioli llegamos a 42 puntos”, se entusiasmó un dirigente K. El tiempo dirá si lo suyo es confianza o voluntarismo.