Julio Cobos les dijo que el lanzamiento de la línea interna Renovación Federal iba a “complicar” la posibilidad de un acuerdo. Del otro lado de la mesa, Gerardo Morales, Ernesto Sanz y Angel Rozas le recriminaron el ultimátum que les había lanzado en los últimos días, cuando les advirtió que se buscaran otro candidato a presidente si el próximo titular de la UCR no es un hombre de su confianza. El cruce de acusaciones entre el vicepresidente y la plana mayor del radicalismo duró menos de media hora y finalmente llegaron a un acuerdo: bajar el tono de la discusión y trabajar para lograr una “conducción unificada”. Tanto Cobos como la orgánica radical negaron rotundamente que en el encuentro se hubiera consensuado el nombre del sucesor de Morales. Sin embargo, la reaparición del chaqueño Rozas en las actividades del partido y su participación en la reunión lo colocan en el centro de la escena, siempre y cuando el mendocino Ernesto Sanz no revea su decisión de mantenerse como jefe del bloque de senadores.

En las últimas semanas la relación se tensó hasta poner el peligro la vuelta del vicepresidente y los suyos a la UCR. Las declaraciones de Cobos habían caído pésimo entre los guardianes del radicalismo que rechazaron de plano la posibilidad de que el economista y ex diputado Raúl Baglini suceda a Morales. Por lo bajo le recriminaban que no era “con amenazas” mediáticas la forma de buscar un acuerdo después de la división que vivió el radicalismo en 2007. Apremiado por la buena imagen del vice, el titular del partido armó el lanzamiento de Renovación Federal junto al bonaerense Ricardo Alfonsín, el cordobés Mario Negri y el mendocino Sanz, entre otros. En ese contexto, la lucha por la conducción se encaminaba a dirimirse por medio de la votación de los 102 delegados al plenario del Comité Nacional. De ambos bandos ya empezaban a contar sus votos.

Cerca del presidente de la UCR relataron que fue el vice quien llamó por teléfono y le pidió la reunión para acercar posiciones. Sanz y Rozas hicieron gestiones para concretar el encuentro.

“Estamos impulsando una lista de unidad que hemos convenido con Morales, Sanz y Rozas con la idea de que en el Comité Nacional estén reflejados todos los sectores internos del radicalismo”, anunció Cobos después de la cumbre, cuando concurrió a la inauguración de una biblioteca popular denominada “Raúl Alfonsín”. Allí se fotografió con Margarita Stolbizer, a quien algunos postulan como su posible compañera de fórmula en 2011.

Cobos dejó sin habla a más de uno porque dio a entender que ya se había acordado la “lista de unidad” que coronaría al próximo presidente del partido. Después se aclaró el tema: el compromiso al que arribaron no es ése, sino “la búsqueda de una conducción unificada” que surja de un consenso entre las partes.

Altas fuentes del cobismo y de la UCR le negaron a este diario que se haya conversado sobre el nombre del sucesor. En estos meses cada espacio fue barajando sus nombres. La “resistencia” tiene dos aspirantes: Negri y Rozas. Los íntimos del vice objetan a Negri por ser amigo personal de Lilita y estar enfrentado internamente con Oscar Aguad, un aliado incondicional de Cobos. Rozas genera menos resistencias en el entorno de Cobos. La idea de Baglini impulsada por los cobistas parece diluirse. Hasta tanto Sanz no cambie de idea, seguirán las negociaciones para alcanzar un acuerdo. A partir de ahora serán más reservadas y menos ásperas.