Lun 09.12.2002

EL PAíS

Las cámaras ocultas prometen un rápido estrellato para Sobisch

El gobernador de Neuquén quedó envuelto en un escándalo por coimas por la difusión en televisión de grabaciones en su contra.

El gobernador de Neuquén, Jorge Sobisch, quedó envuelto en un escándalo por coimas luego de que un diputado provincial radical, Jorge Taylor, grabara a un hombre de su confianza mediante una cámara oculta. En la grabación, que anoche se emitió por televisión, se pudo ver al enviado de Sobisch ofreciéndole 600 mil pesos a Taylor para que diera quórum en la próxima sesión de la Legislatura neuquina en la que pensaban elegir a un nuevo integrante del Tribunal Supremo de Justicia de la provincia.
Taylor es radical pero fue electo diputado provincial por la Alianza. Como resolvió apoyar la candidatura presidencial de Ricardo López Murphy, quien se presentará con su propia fuerza política, Taylor anunció que renunciaría a su banca porque no le parecía ético ocupar un lugar que le correspondía a un partido al cual ya no obedecería. Fue entonces que Sobisch y los hombres del Movimiento Popular Neuquino se dieron cuenta de que se quedarían sin quórum para la próxima sesión, en la cual pensaban aprobar el nombramiento de un ministro de la Corte provincial. Actualmente, la Corte de Neuquén tiene tres lugares vacantes. Lo que resolvieron, de acuerdo a lo que pudo verse anoche, fue acercarse a Taylor para tratar de convencerlo de que todavía no renunciara a cambio de una coima.
Taylor acudió al estudio jurídico del ex fiscal Luis Moreno Ocampo y grabó las negociaciones mediante una cámara oculta. El resultado se vio anoche en el programa “Periodistas” que emite América. Las escenas grabadas tenían al principio como escenario al despacho del Gobernador, que siempre mantuvo su trabajo de seducción en los difusos límites de la política, aunque señaló a Osvaldo Ferreyra como el hombre de su confianza que después llevaría adelante las negociaciones monetarias. Después se trasladaron a la casa del propio Taylor, quien el sábado pasado recibió la visita de Osvaldo Ferreyra, vicepresidente primero de la Legislatura provincial.
Al menos en tres oportunidades a lo largo de la charla, Taylor y Ferreyra repitieron el mismo diálogo.
Ferreyra le contaba al radical que Sobisch –a quien siempre se refiere como “Jorge” y en una ocasión como “el gobernador”– le había pedido que resolviera su tema. “Lo vamos a caminar por el IADEP”, le explicó Ferreyra, en referencia al instituto provincial que se encarga de dar créditos a bajo costo supuestamente para financiar proyectos productivos. Lo que le ofrecía a modo de soborno era darle un préstamo a Taylor en un plazo de “15 días, máximo 20”. Pero la operatoria no cerraba del todo: primero, porque era necesario que el diputado radical formara una sociedad; segundo, porque Taylor –que actuaba su papel– decía que no lo convencía porque, por lógica, si le daban un préstamo lo tenía que devolver. “Un crédito con intereses bajos yo lo consigo”, respondió Taylor, haciendo como que la oferta no lo seducía. “Jorge me dijo: ‘Vos dale mi garantía personal que le dije que sí, que esto sale’”, le relató Ferreyra a Taylor el diálogo que había mantenido con Sobisch.
Al radical ni siquiera le pedían que aprobara el nombramiento del nuevo integrante de la Corte. “Con que te sientes, alcanza”, lo tranquilizó Ferreyra. A lo sumo tendría que abstenerse en la votación. Lo que inquietaba a Ferreyra era que la sesión probablemente iba a suceder antes de que Taylor pudiera cobrar su coima, por lo que se le notaba que quería saber qué actitud tomaría entonces el radical. En el único momento que se habló de cifras, Ferreyra dijo que se le aprobaría “un financiamiento en el orden de los 600”. El diputado Taylor, presente en el estudio, contó que si bien en algún momento se barajó un soborno de 900 mil pesos, luego se bajó a 600 mil aunque también surgió la posibilidad de unos 35 mil pesos más en Lecop. “Buscar alguna alternativa: lecop”, lanzó sobre el final de la grabación el hombre de confianza de Sobisch. Aparentemente, el pago de la coima en cuasi moneda resultaría más sencillo porque no había necesidad de asentar el registro contable en ninguna parte. Como no terminaban de encontrarle la vuelta a la manera de hacer efectivo el pago, Ferreyra analizó la posibilidad de suspender las sesiones de la Legislatura hasta marzo. Entonces, con algunos meses por delante, ya encontrarían la forma de sacar plata de algún lado. Luego de conocida la grabación no hubo ninguna reacción desde el gobierno de Neuquén, mientras que algunas ONG prometían un cacerolazo de protesta.

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