En el peor de los climas internos, los ministros de la Corte Suprema intentarán hoy en una reunión plenaria especial ponerse de acuerdo, al menos, en un cronograma para fallar lo antes posible sobre la pesificación y el corralón. El encuentro será después de que se sorteen los tres conjueces que deberán expedirse en los temas en que el tribunal no logra juntar cinco votos. Algunos de los cuatro ministros que impulsan la redolarización de depósitos tratarán que en esta misma reunión se resuelva el expediente en que la provincia San Luis reclama 247 millones de dólares acorralados. Especulan con convencer a Antonio Boggiano para que se sume. La realidad es que en el fondo todavía nadie canta victoria.
Si nada altera las promesas que los supremos hacían hasta ayer a la noche, hoy estarán todos sentados en el acuerdo. Incluso Adolfo Vázquez, que el martes envió una nota a sus pares diciendo que no concurriría a ningún plenario más hasta que hubiera una verdadera decisión de resolver algún expediente sobre pesificación. En la misma carta acusaba a uno de sus colegas –a quien no mencionaba pero evidentemente se trataba de Boggiano– de practicar maniobras dilatorias operando para los bancos.
El sorteo de conjueces, que se hará en el Palacio de Justicia a la vista de quien quiera presenciarlo, apunta a designar tres presidentes de cámaras para poder resolver, en principio, la excusación de Carlos Fayt, posterior a que se supiera que tiene un plazo fijo de 200 mil dólares en le Banco Nación. Cuatro ministros estarían dispuestos a rechazar ese apartamiento, de manera que con un voto más podrían forzar a Fayt –que había escrito una minuciosa propuesta redolarizadora– a que se pronuncie en el caso de la ahorrista María Ester Beratz. Con los jueces transitorios también se trataría la excusación de Enrique Petracchi. Todo ese proceso, de todos modos, llevará tiempo y habrá que ver si los conjueces no se excusan. Por eso los ministros tratarán de fijar plazos.
Un sector de tribunal ve en el expediente de San Luis un atajo para dictar la inconstitucionalidad de la pesificación. La idea de se deben devolver los ahorros en moneda de origen es apoyada por Julio Nazareno, Guillermo López, Eduardo Moliné O’Connor y Vázquez. La expectativa de que Boggiano podría sumarse aunque sea con una disidencia parcial, surgió a partir de que el martes puso a circular un borrador en el que se muestra dispuesto a un acercamiento. De lo que Boggiano parece no querer moverse es de una fórmula que disponga que la devolución debe correr parte por cuenta de los bancos y otro tanto por cuenta del Banco Central. el Congreso o el Ejecutivo fijarían plazos de restitución del dinero. Este planteo no tiene consenso. Los jueces de la llamada mayoría automática impulsan que los bancos y los clientes negocien y, si fracasan, que el desenlace lo disponga el juez de primera instancia.
Otro tema pendiente en la Corte es resolver la recusación que los abogados de Nito Artaza plantearon cuestionando la intervención de Boggiano en causas del corralito, teniendo en cuenta que fue postulado por el Gobierno para el Tribunal Penal de La Haya. Vázquez ya hizo un borrador proponiendo admitir ese planteo. Algunos jueces dicen que esta situación podría implicar un nuevo escollo si la intención es resolver algo hoy.