La senadora y primera dama uruguaya, Lucía Topolansky, confirmó la voluntad del presidente José Mujica de aceptar el monitoreo conjunto al río Uruguay, tal como lo dispuso el fallo de la Corte de Justicia de La Haya. Pero que el monitoreo debe ser integral, por lo que, además de Argentina y a Uruguay, debe incluir a Brasil.

Una voz muy influyente en el gobierno, la senadora Topolansky, vino hablando desde comienzos de semana sobre el conflicto entre ambos países y la cuestión del monitoreo. Ayer, en declaraciones al programa uruguayo En perspectiva, insistió en que el control al río debería ser tripartito. “Se va a plantear en el contexto de monitorear todas las márgenes del río”, sostuvo la primera dama y tercera en la línea de sucesión de la presidencia, debido a que fue la senadora más votada.

“Durante años, Fray Bentos vertía toda la red cloacal de saneamiento sin tratamiento. Ahora lo hace con tratamiento a través de la planta de Botnia. Pero no es la única ciudad que está sobre el río y ese es un problema de contaminación que es más silencioso pero que existe”, añadió.

La senadora concluyó que “hay que controlar la salud del río. Ya que vamos a controlar hagámoslo in totum, por eso también hablamos de Brasil”.

Cristina Kirchner y Mujica ya hablaron de la cuestión del monitoreo durante el encuentro que mantuvieron en la Estancia Anchorena, en Colonia, y también en un llamado telefónico que se cruzaron el lunes. El gobierno uruguayo viene insistiendo en la posibilidad de sumar a Brasil, posibilidad que en principio la presidenta argentina aceptó, aunque es una cuestión que recién comenzó a discutirse y todavía demandará de mayores precisiones. Argentina insiste en que el monitoreo debe incluir a la planta de Botnia.