EL PAíS
Toma ganó la interna pero se quedó sin candidato a jefe de Gobierno
El tomismo se impuso en la interna del peronismo porteño justo cuando Scioli aceptó ser vice de Kirchner. La lista perdedora, hegemonizada por sindicalistas, reclamaba anoche la minoría.
El Partido Justicialista (PJ) de la Capital Federal quedará hoy sin candidato a jefe de gobierno porteño a menos de 24 horas de haber ungido oficialmente a Daniel Scioli en elecciones internas abiertas. El secretario de Turismo, hombre de consenso de los dos sectores que se enfrentaron ayer en las urnas, dejará de lado los votos de los afiliados e independientes y le dará el “sí” al gobernador santacruceño Néstor Kirchner, que le ofreció el segundo lugar en la fórmula presidencial que él encabeza.
Los comicios de ayer parecían a priori un trámite. Pocos minutos antes de las 20, la lista de unidad Verde, Azul y Blanca que conformaron duhaldistas y menemistas en el distrito porteño aseguraba haber obtenido el 78 por ciento de los votos. Durante la miniconferencia de prensa realizada en la sede del Sindicato Unico de Trabajadores de Edificios de Renta y Propiedad Horizontal (Suterh), comando electoral del oficialismo, el jefe de la SIDE, Miguel Angel Toma, destacaba “el alto grado de participación” que situaba en torno de las “40 mil personas, entre afiliados e independientes” y calificaba como “altamente valorable” la actitud asumida por el sector contrario.
Con esas cifras, la boleta que llevaba a Cristian Ritondo (cabeza de la lista de diputados nacionales), Diego Santilli (primer legislador porteño) y Miguel Angel Toma (candidato a presidir el PJ Capital) lograba la mayoría y la minoría. Quedaba así fuera de carrera la opositora lista Roja y Verde liderada por Jorge Viviani (candidato a diputado nacional), Daniel Amoroso (cabeza de la lista de legisladores porteños) y Amadeo Genta (postulante a la presidencia del PJ Metropolitano).
La situación ya no era tan clara dos horas más tarde, cuando Daniel Amoroso mostró su desconfianza en los resultados conocidos hasta el momento. Al salir de una reunión con Miguel Angel Toma en el City Hotel, a la que concurrió junto a su compañero de lista Jorge Viviani, Amoroso afirmó: “Vamos a esperar el conteo voto por voto”. “Tenemos una diferencia con la otra lista respecto a la cantidad de gente que ha sufragado y a los votos registrados”, aclaró. La cifra que manejaba Amoroso le daba a su sector el 27,3 por ciento de los sufragios, lo que aseguraba a su lista la minoría y con ella la posibilidad de colocar algunos de sus candidatos dentro de la boleta que presentará el PJ porteño en las elecciones legislativas nacionales y comunales. Cerca del legislador atribuían la diferencia con la lista Verde, Azul y Blanca al entusiasmo del oficialismo, que se adjudicó la victoria cuando se había escrutado el 45 por ciento de las mesas, y aseguraban que Toma estaba dispuesto a aceptar la nueva situación.
En ese momento, el clima ya no era tan alegre. La discusión planteada por la lista Roja y Verde se sumó al faltazo de Daniel Scioli. El ex piloto de off-shore desairó a los medios de comunicación y a sus propios compañeros de partido que se habían acercado desde temprano al modernísimo edificio del Instituto Superior Octubre (ISO) del Suterh. El único rastro que quedó en el lugar del hombre más buscado del país en las últimas 24 horas fue una pintoresca presentación en PowerPoint con la leyenda “Daniel Scioli Jefe de Gobierno”, proyectada sobre la pantalla de la sala de conferencias.
Un candidato en suspenso y unos resultados discutidos fue el saldo de una jornada en la que, según Toma, el peronismo porteño dio “el primer paso hacia la normalización del partido (actualmente intervenido) en el distrito”.
Informe: Mariano Roca.
Subnotas