Estaba solo y trataba de ocultarse debajo de una peluca rubia, una barba al tono y lentes de contacto de color claro. Como un turista postrero del verano que se va, paseaba con aire distendido por la zona de Playa Grande, en Mar del Plata. Primero lo filmaron, sigilosos, durante una primera salida matutina. Luego de chequear el material obtenido en esa primera aproximación, los sabuesos confirmaron que se trataba del hombre más buscado de la Argentina en los últimos dos meses: Horacio Conzi finalmente se entregó en la calle, sin ofrecer resistencia, quebrado, con absoluta resignación. La Secretaría de Inteligencia de Estado (SIDE), organismo que había estado sospechado de cubrir la fuga del enemigo público número uno, fue la que se adjudicó el hallazgo del paradero. Ellos fueron los que “se lo entregaron” a los agentes de Análisis Delictivo, de la Policía Federal, que habían llegado a Mar del Plata tras el mismo objetivo. La Federal, en cambio, insinuó que el protagonismo principal fue el de sus hombres. En la detención fueron claves dos hechos: un celular que Conzi había comprado en un supermercado y que fue interceptado por la SIDE y el impulso que generó el enojo del presidente Eduardo Duhalde.
“Los de la agencia Télam lo encuentran y ustedes no hacen nada”, es el sentido, no la frase textual, que habría expresado el Presidente. Antes, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Felipe Solá, había reconocido que era evidente que Conzi contaba “con una red de protección” muy aceitada, que lo había convertido en inalcanzable durante 57 días consecutivos. “No puedo creer que lo hayamos logrado. Esta vez vamos a ganar los buenos”, expresó anoche Elsa Schenone, la mamá del joven Marcos Schenone, de 23 años, por cuyo asesinato se había pedido la captura nacional e internacional de Horacio Conzi. A través de distintos voceros de la gobernación, se supo que también estaba “muy satisfecho” el gobernador Solá. El ministro de Seguridad, Juan Pablo Cafiero, dijo por su lado que siempre confió en que “los contactos y supuestos favores que recibía se le iban a ir con el tiempo. Nadie iba a poder acompañarlo y los supuestos contactos fueron desapareciendo”.
El titular de la SIDE, el ex funcionario menemista Miguel Angel Toma, también salió a dar la cara de alegría ante un logro que hasta ayer parecía imposible. “De ahora en más comienza la tarea de inteligencia para descubrir la red de protección que sin duda tuvo Conzi porque es evidente que tuvo que tenerla”, reconoció Toma. El juego de palabras parece una respuesta a las sospechas que involucraron a la propia SIDE. En su momento, a través de distintas fuentes, se mencionaron los nombres del segundo del organismo, Oscar Rodríguez, y de uno de sus colaboradores inmediatos, el ex concejal de San Isidro Miguel Angel Maldonado.
Tiempo atrás se supo que la SIDE había abierto un sumario interno para investigar el caso, pero Toma no habló ayer sobre ese punto. “Ahora vamos a investigar. No podíamos hacerlo antes”, fue la justificación del titular de la central de inteligencia. Toma explicó que el problema que se plantea es similar al de los secuestros: se investiga la red de cobertura una vez que se encuentra a la víctima. Ahora se puede investigar porque el pájaro fue sorprendido luego del largo vuelo.
La detención de Conzi se produjo en la calle. Acá también las versiones varían según la SIDE o según la Federal. La detención se habría producido en la calle Urquiza, entre Falucho y Gascón, a dos cuadras del lugar donde estaba alojado. Fue en la zona de Playa Grande y tuvieron que detenerlo en la calle, por una simple razón: no tenían una orden de allanamiento. Los fiscales Mario Kohan y Hernán Collantes, como una imagen cruda de la Argentina actual, llegaron a Mar del Plata varias horas después de la detención, por la ruta, en automóvil, porque no encontraron avión de línea disponible. Si bien Conzi estaba solo, se sabe que lo acompañaba un hombre que era quien salía a hacer las compras.
El chalet donde estaba parando está ubicado en Alberti 67, de acuerdo con lo informado a este diario por fuentes de la Federal. Anoche Conzi había quedado detenido en la delegación de esa fuerza en Mar del Plata, cuyo titular es el comisario Fernando Fernández. La sede de la Federal está en la calle Sarmiento, a media cuadra de la terminal de ómnibus. Conzi vestía traje oscuro, una peluca rubia y llevaba puesto unos lentes de contacto. Hay quienes dicen que tenía barba y quienes afirman que no. La confusión se debe, en parte, a que el aspecto del prófugo cambiaba en todo momento. Eso mismo ocurrió en las dos salidas a la calle que fueron registradas por los investigadores, de manera que la descripción varía, según las fuentes sean de la SIDE o de la Federal.
El abogado Fernando Burlando, que desde hace tiempo viene hablando en nombre de Horacio Conzi, aseguró anoche que ahora se presentará oficialmente como representante legal del hasta ahora prófugo. “Vamos a presentar nuevas pruebas que van a demostrar su inocencia. Hasta ahora no estaban dadas las garantías y por eso se mantuvo prófugo.” Según había adelantado el propio Burlando, habría tres supuestos testigos presenciales que desvincularían a Horacio Conzi del crimen. Hasta ahora, los fiscales Kohan y Collantes parecen tener todas las pruebas necesarias como para justificar su procesamiento y su prisión preventiva por homicidio. Hugo Conzi dijo tener pruebas para demostrar que el arma de su hermano “no fue usada” en el hecho, algo que ya ha sido probado en dos pericias balísticas.