El bloque del Peronismo Federal (PF) en el Congreso continúa perdiendo adeptos. Los diputados nacionales por Santa Fe, ligados a Carlos Reutemann, anunciaron que “para fortalecer el peronismo” de la provincia abandonarán el espacio del PJ disidente y conformarán uno propio, según anunció la diputada Celia Arena. El reutemanismo baraja y da de nuevo después del portazo anunciado la semana pasada por Felipe Solá, que inició el cisma en el peronismo díscolo. Mañana se reunirá el bloque del PF por última vez tal y como estuvo constituido desde 2009 hasta los últimos días. También se esperan novedades de los cordobeses, que podrían tomar un camino parecido.

“La determinación de Solá de dejar el bloque precipitó la decisión de conformar un espacio peronista de Santa Fe”, aseguró a Página/12 un allegado a los diputados santafesinos que integran el Peronismo Federal. Así, esta semana los diputados reutemanistas se abroquelarán y conformarán un espacio propio desde el que “se defenderán los intereses de la provincia”. La diputada Celia Arena es la que encabeza el grupo de seis, también integrado por el ex gobernador Jorge Obeid, Carlos Carranza, Daniel Germano, Juan Carlos Forconi y Walter Agosto. “La idea es que a partir del 23 de octubre va a haber un bloque de seis diputados peronistas por Santa Fe y a partir del 10 de diciembre va a estar integrado por cuatro”, señaló un dirigente, advirtiendo la finalización del mandato de Obeid y Agosto.

La diáspora había sido discutida entre los santafesinos para después de las elecciones del 23 de octubre, una vez pasado el vendaval de las presidenciales. Pero “el anuncio de la partida anticipada de Felipe Solá” del bloque generó el efecto dominó. El jueves pasado se encontraban reunidos los seis integrantes santafesinos del Peronismo Federal para “conversar sobre la reunión de Celia (Arena) con (el ministro de Economía, Amado) Boudou. La novedad de que Solá se iba del bloque nos llegó por la televisión, una vergüenza, pero decidimos adelantar el movimiento que ya teníamos conversado”, destacó una fuente del reutemanismo.

Además de los más de diez millones de votos que consiguió la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en las elecciones primarias de agosto, el cambio en las condiciones políticas en la provincia también pesó en la decisión. Por primera vez, Santa Fe tendrá un gobierno de un signo (socialista) y el poder legislativo estará en manos de la mayoría de otro (el PJ). El acercamiento entre el kirchnerismo y los seguidores del senador Carlos Reutemann es consecuencia directa del acuerdo partidario al que llegó el PJ en febrero, por el que se había decidido unificar a los distintos sectores y que puso al jefe del bloque del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, como candidato para gobernar la provincia. Aunque finalmente perdió la elección, Rossi fue uno de los artífices del proceso de unidad del PJ santafesino que cerró filas para las elecciones del 24 de julio.

Pero el resquebrajamiento del Peronismo Federal había empezado mucho antes. Las cartas ya estaban echadas cuando la mesa de conducción del PF se fue desgajando poco a poco, a medida que sus dirigentes perdían legitimidad en las urnas. Primero fue el propio Solá cuando anunció que no participaría de la elección interna para elegir la fórmula del espacio peronista antikirchnerista por la “desigualdad de aparato”, en referencia a los gobernadores. Después fue el gobernador de Chubut, Mario Das Neves, quien se vio en la obligación de bajarse de la disputa ante el magro resultado que obtuvo en su provincia, quedando al borde de perderla a manos del kirchnerismo. Finalmente, la interna entre Alberto Rodríguez Saá y Eduardo Duhalde fue suspendida por denuncias mutuas de fraude y trampas, lo que posibilitó la resurrección de Das Neves que fue invitado por Duhalde para ser su candidato vicepresidente.

El bloque que hasta ahora comandaba Solá –compuesto por 28 diputados– quedaría con 19 legisladores, descontando al bonaerense y sus dos seguidores, Roberto Mouillerón y Raúl Rivara, y los seis santafesinos. Además, se esperan nuevos movimientos de los diputados peronistas cordobeses, que también estarían evaluando la posibilidad de conformar un bloque propio. Si bien el “cordobesismo” anunciado por el gobernador electo José Manuel de la Sota se murió con el resultado obtenido en las primarias por Fernández de Kirchner, el posicionamiento cordobés sería parecido: facilitar la tarea legislativa del oficialismo, sin alinearse de forma cerrada con el kirchnerismo.

Los legisladores del PF fueron convocados por Solá para mañana, a las 19, a una reunión en la que les comunicará formalmente su salida del espacio político, a lo que se sumará el abandono de los diputados de Santa Fe. La jefatura del bloque quedaría vacante hasta después de las elecciones –es la opción con mayor consenso– por la reconfiguración que está pasando el bloque. El rumbo que tomará el PF quedará en suspenso, con el duhaldismo intentando encabezarlo, aunque las perspectivas electorales de los candidatos pueden terminar volcándolo a favor de los sectores de Alberto Rodríguez Saá o de Francisco de Narváez.