El comisario Sergio Luis Ochoa fue desafectado de su cargo e imputado por la auditoría general de Asuntos Internos del Ministerio de Justicia bonaerense, debido a los incidentes ocurridos en la Legislatura provincial, cuando miembros de Infantería golpearon a militantes de La Cámpora, durante el acto de reasunción del gobernador Daniel Scioli, el 12 de diciembre pasado. Ochoa será citado a declarar para establecer el grado de responsabilidad que pudo haber tenido en el accionar policial que, al impedir el ingreso de la agrupación juvenil kirchnerista a los palcos del edificio, dejó un saldo de dos militantes heridos. Por el mismo hecho, seis policías ya fueron separados de sus funciones.

El oficial desafectado ejercía en el momento del incidente la jefatura de Custodia de Objetivos Fijos, Personas y Traslado de Detenidos de la Policía Bonaerense. En los próximos días será citado a declarar por Asuntos Internos, que ya tomó testimonios a los seis policías de Infantería desafectados por su participación en los hechos: Walter Revolero, Raúl Molina, Leonardo Dos Santos, Alejandro Barrios, Daniel Maidana y Fernando Louver.

La investigación al comisario Ochoa se dispuso luego de que los policías desafectados revelaran en Asuntos Internos que habría sido él quien ordenó a Revolero, responsable del grupo, que se apostara en las escaleras e impidiera el paso de los militantes. “Se resolvió imputar y desafectar a Ochoa de su cargo a fin de que declare y se investigue su responsabilidad en esos incidentes”, señalaron fuentes de la cartera de Justicia provincial.

En paralelo a la medida, se abrió una investigación judicial a cargo del fiscal platense Tomás Morán, que días atrás citó a declarar al jefe Operativo de la Policía, Hugo Mazkin, quien aseguró no haber tenido responsabilidad en el operativo desplegado por Infantería. El fiscal Morán también podría citar a declarar a Ochoa.