Dirigentes sindicales de la CGT agrupados en contra de la continuidad de Hugo Moyano al frente de la central obrera se reunieron ayer para evaluar “estrategias para analizar una impugnación a la convocatoria” al Comité Central Confederal (CCC), aseguró el dirigente de Sanidad Héctor Daer. El antimoyanismo buscará impugnar la convocatoria argumentando “falta de quórum” en la reunión de Consejo Directivo de donde se emitió el llamado. El secretario general de la Uocra, Gerardo Martínez, confirmó que “hay contactos con Moyano en el marco de una determinación de competir” el próximo 12 de julio en el microestadio de Ferro, cuando se elijan las autoridades cegetistas.

“Se observó la legalidad de la convocatoria al CCC del Consejo Directivo y se resolvió que hay que corroborarlo, para lo que se convocará a más reuniones en ese sentido”, informó Martínez al finalizar el cónclave que mantuvo con los dirigentes de los gremios más grandes de la CGT en la sede de Luz y Fuerza. Esta es la segunda reunión oficial que realiza el antimoyanismo, aunque pasaron a cuarto intermedio hasta la semana próxima, donde abrirán la convocatoria. El anfitrión, Oscar Lescano, aseguró que Moyano “tiene que aceptar que tiene que ser relevado; él tiene que aceptar que no puede seguir y si no quiere alejarse va a haber confrontación, no hay la menor duda”.

Desde que Moyano anunció que se presentará para continuar un período más al frente de la central obrera, los gremios enfrentados a él se unieron con aquellos que no ven con buenos ojos la disputa que mantiene el camionero con el gobierno nacional. Los “independientes” –Andrés Rodríguez de UPCN, Martínez de la Uocra y José Luis Lingieri de Obras Sanitarias–, los “gordos” –vinculados a la conducción de la CGT durante el menemismo– que siempre se mantuvieron al margen de la organización y el “barrionuevismo” –que se concentra en la CGT Azul y Blanca, por fuera de la CGT– y los no alineados, como los metalúrgicos y los mecánicos, se agruparon para evitar que Moyano continúe cuatro años más al frente de la CGT y lanzaron al ruedo la candidatura del metalúrgico Antonio Caló. A mediados de abril elaboraron un documento en el que llamaban a “la unidad del movimiento obrero” pero “sin personalismos”, en un claro mensaje hacia Moyano.

“Se conversó sobre estrategias para analizar una impugnación a la convocatoria al CCC”, afirmó Daer, quien precisó que “existió consenso político” entre los gremios que participaron del encuentro y agregó que se estaban observando las “herramientas legales” para lograr el objetivo. Martínez, que fue uno de los primeros nombres que habían aparecido como posibles candidatos para reemplazar a Moyano, señaló que “la idea fundamental que perseguimos todos es que hay que agotar las instancias para poder llegar al 12 de julio en un congreso donde podamos lograr la unidad”, y agregó, sobre la posibilidad de llegar con “más de un candidato, que haya un proceso electoral democrático participativo que sea un ejemplo que da el movimiento sindical”.

Mientras Moyano sigue haciendo campaña por el país y reuniendo gremios y seccionales no alineadas con la conducción de sus respectivos sindicatos, los antimoyanistas continúan recalcando que tienen la mayoría de los delegados para el congreso. “Nosotros tenemos a 1300 delegados congresales de los 1700 o 1800 en total, porque si dicen que son 2000 es porque eso está fraguado, está inventado”, sostuvo Lescano, mostrando una arista más de la discusión que podría llegar a la Inspección General de Justicia para que estudie la legalidad de los padrones. Acusan al camionero de querer hacer votar a “sindicatos y afiliados nuevos, que no cumplen con los requisitos mínimos para participar de la elección”, confió a Página/12 un dirigente que participó de la reunión.

Después de la reunión y de la solicitada que firmaron los no moyanistas a favor de la nacionalización de YPF, el espacio político sindical se reunirá nuevamente el martes próximo en la Uocra, a la que Lescano anunció que asistirán “por primera vez dirigentes moyanistas que están dubitativos”.