EL PAíS
› “HICIMOS MAS DE LO QUE PENSABAMOS QUE PODIAMOS”
Duhalde hizo el balance
En su programa de radio, se autoelogió, anunció que vuelve a dar clases, prometió que no ocupará cargos y pidió al PJ que “se encolumne” para apoyar al nuevo presidente.
› Por Martín Piqué
“Creo que hicimos un poco más de lo que pensábamos que podíamos hacer”, evaluó ayer Eduardo Duhalde a la hora de hacer un balance de su gestión. Era su anteúltima emisión como figura central del programa de los sábados, y como corresponde, el Presidente optó por un tono elogioso –una verdadera alabanza– para su Gobierno y los funcionarios que lo integraron. Aunque sin nombrarlo, su elogio elevó especialmente a su ministro de Economía, Roberto Lavagna, quien no por casualidad continuará su trabajo en la administración de Néstor Kirchner. “Hoy nos vamos, a un año y medio, en una especie de llanura con un crecimiento del 5 por ciento”, dijo.
“Cuando nadie lo creía, cumplimos todo lo que dijimos: tenemos tres meses consecutivos de crecimiento”, destacó Duhalde en su habitual espacio radial de los sábados. “Vamos a entregar el 25 de Mayo al presidente electo, el país como lo prometimos: trabajando, de pie y en paz”, agregó, citando al eslogan de los spots televisivos de su Gobierno. Con espíritu reflexivo, su balance se pareció a lo que hacen todos los mortales cada vez que llega fin de año. Claro que para él es otra cosa: la despedida de la Rosada, de la quinta de Olivos, y su regreso al llano, a la vida cotidiana, que en este caso incluye, obvio, a la política. “No voy a ocupar ningún cargo –prometió en relación al próximo Gobierno–, ni tampoco en el partido (por el PJ).”
Esta última referencia no fue casual, porque en los últimos días se escucharon voces bonaerenses, portavoces del duhaldismo “de paladar negro”, que ubicaban a Duhalde como presidente del justicialismo. Otros dirigentes, como el intendente de La Matanza, Alberto Balestrini, pidieron en cambio que fuera Kirchner el próximo titular del PJ. Con sus declaraciones de ayer, el propio Duhalde pareció zanjar la cuestión, y anticipó que luego de retirarse del Gobierno volverá a dictar clases en su cátedra de la Universidad de Lomas de Zamora. Sin embargo, aún se recuerda su frase “vuelvo a la inmobiliaria” que pronunció tras la derrota electoral de 1999. Todo el mundo sabe que no fue así.
Aunque su asunción como titular del PJ esté en duda, lo que sí es seguro es que la tarea que Duhalde se reserva para sí mismo es la de mantener el apoyo del peronismo al nuevo presidente. Ayer, en su programa de radio Nacional, dio las primeras pistas en ese sentido. Dijo que su función, luego de la asunción de Kirchner, será “ayudar” a la gobernabilidad del país con su “experiencia”. Luego advirtió a los dirigentes del PJ que “doten a quien gana de las posibilidades de gobernar”, y les pidió que se encolumnen “detrás del presidente electo” como el peronismo lo ha hecho siempre con cada gobierno de ese partido. “Hoy el justicialismo debe seguir a su presidente, debe apoyarlo con todo”, instruyó.
En su evaluación de gestión, Duhalde no se privó de subrayar lo que consideró el mayor logro de su administración. “La medida más importante fue la implementación de los programas sociales para los excluidos”, aseguró. “Podremos haber cometido muchos errores, pero entre las cosas que se hicieron mal, no figura ni la corrupción, ni la frivolidad, ni eso de despilfarrar el dinero para nada”, se jactó después el Presidente. Finalmente, completó su balance con una frase de su genio que se cansó de repetir ante las cámaras. De tanto repetirla, la popularizó como su marca registrada. “La Argentina no solamente está condenada al éxito, estamos condenados al éxito por nuestra gente, pero tenemos que compatibilizar esa gente con gobiernos buenos”, dijo.
Pero además del balance de su gestión, Duhalde se preocupó por adelantar los términos de su relación con Kirchner. Porque es consciente de que existen ciertas tensiones con el duhaldismo, como reconoció ayer el diputado José María Díaz Bancalari. “Hay algún interés de instalar incompatibilidad, tensión o confrontaciones entre Kirchner y el justicialismo bonaerense”, advirtió el diputado duhaldista.
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