Los ex oficiales de la Policía Bonaerense Sergio Camaratta y Aníbal Luna (foto) fueron detenidos y deberán continuar cumpliendo con la condena a cadena perpetua por el homicidio del fotógrafo José Luis Cabezas cometido en enero de 1997 en Pinamar. Junto con el resto de la banda de delincuentes conocida como Los Horneros, habían sido encontrados culpables luego del juicio oral realizado en la Cámara de Dolores en el 2000. Sin embargo, un fallo dictado en el 2003 por el Tribunal de Casación de la provincia de Buenos Aires redujo las penas y a partir de 2004 los imputados arrestados entre abril y mayo de 1997, comenzaron a ser favorecidos por la ley del dos por uno, que los habilitaba a ser excarcelados siendo que el tiempo hasta entonces cumplido en prisión preventiva se computaba por el doble. Así fue que Camaratta y Luna quedaron en libertad en octubre de 2006, ya que habían pasado tres años encarcelados sin sentencia firme, sumando en total doce años. No obstante, el 19 de septiembre de 2007, la Corte bonaerense revocó el fallo del Tribunal de Casación y confirmó las condenas perpetuas dictadas en el 2000. Todos los imputados apelaron a la Corte Suprema, pero los recursos fueron rechazados, lo cual derivó en una serie de presentaciones de la familia de Cabezas para que se realice un nuevo cómputo y que los condenados vuelvan a prisión. Con las detenciones de Camaratta y Luna, son cuatro los que actualmente están presos por el crimen. Completan la lista Horacio Braga y José Luis Auge, quienes violaron el régimen de arresto domiciliario. El resto de los imputados cumple con arresto domiciliario: el ex policía Gustavo Prellezo –autor material–, el ex sargento del Ejército Gregorio Ríos y el ex comisario de Pinamar Alberto Pedro Gómez.