En 1994, la cadena estadounidense NBC se encontraba en la búsqueda de una serie cómica que reemplazara a “Wings”, la comedia que después de varios años de éxito se despedía de su programación. Los productores Marta Kaufman y David Crane les hicieron llegar a las autoridades el guión de “Parejas”, una serie que indagaba el mundo de un grupo de treintañeros casados y con hijos a cuestas. Pero la idea no gustó porque la NBC quería un programa “más de moda, más cool”. La serie del momento era “Mad about You”. Así fue que los productores volvieron con un guión bajo el brazo que se centraba en un heterogéneo grupo de amigos solteros de Nueva York. Su título era “Friends Like These” (“Amigos como estos”). Pese a que la idea no era muy novedosa, la NBC les dio el OK a Kaufman y Crane para la realización del piloto. Ese primer programa fue tan bueno que la serie fue aprobada sin tocar absolutamente nada. O casi nada: sólo se acortó el título a “Friends”, a secas. La idea se convertiría en una de las series más populares de la historia Por ello, más de un fan no podrá despegar los ojos de la pantalla este viernes a las 19, cuando E! Entertainment Television emita un recorrido por su historia.
La idea de programar en este momento un especial de “Friends” no es antojadiza: promediando la novena temporada, los rumores de que este será el último año suenan con fuerza. La finalización no obedece a cuestiones de rating: en la temporada anterior, “Friends” fue la serie más vista en EE.UU. Pero después de nueve años trabajando juntos, los actores –con buenas carreras sobre sus espaldas– lucen evidentemente destastados Hasta ahora, el desgaste había sido compensando con millonarios contratos (cada uno de los actores gana un millón de dólares... ¡por capítulo!). Pero esta vez parece que ni el dinero mantendrá unido al grupo de amigos, tanto en la ficción como en la realidad.
Estrenada en septiembre de 1994, “Friends” tuvo un lento pero ascendente camino al éxito. Pocos entendían cómo Jennifer Aniston, Matt LeBlanc, Courteney Cox, Lisa Kudrow, Matthew Perry y David Schwimmer, seis actores ignotos hasta ese momento, podían acaparar tanta audiencia con una serie cuya temática era poco innovadora. Lo cierto es que paulatinamente “Friends” se convirtió en un fenómeno de la cultura pop: el erizado pelo que Rachel (Aniston) tenía en las primeras temporadas se convirtió en el peinado de moda entre las adolescentes en aquellos años. La pegadiza cortina musical del ciclo –”I’ll Be There for You”, de The Rembrandts– alcanzó la categoría de top ten en las radios, aun cuando sólo duraba 45 segundos. “Hubo alrededor de 10 radios que editaron los 45 segundos originales e hicieron una versión extendida. Tuvo una gran demanda”, señala Kevin Bright, otro productor.
Aunque la primera temporada fue exitosa (quedó en el octavo lugar de rating y recibió sus primeras tres nominaciones al premio Emmy, que a lo largo de los años iban a totalizar 44), LeBlanc señala en el especial que lo más importante del primer año fue la química que se generó entre todo el equipo. “El programa es sobre todo una gran colaboración. Si la chica de limpieza tiene una idea divertida la incluimos en el show. Todos nos tratamos como iguales. Nos sentimos muy cómodos trabajando y esa química se siente en pantalla”.
Los actores aceptan que el final está cerca. “El reto de las series es que el público no se aburra. Buscar la manera de que la gente se siga divirtiendo no es fácil”, apunta Leblanc. “Por ahora trato de no pensar mucho en el final. Ha sido una experiencia maravillosa. No tengo dudas de que será triste”, acota Perry. Pero es Aniston, la esposa de Brad Pitt, quien sintetiza mejor la situación. “Todo termina. El show ha tenido una vida maravillosa y en estos últimos dos años la gente volvió a tomarle el gusto. Es genial. Pero creo que ya es hora de despedirse y decir `Chau, buena suerte’.”