EL PAíS
› VENTAJA OFICIALISTA EN TIERRA DEL FUEGO. HABRA BALLOTTAGE
Kirchner festejó un poquito
Los justicialistas Manfredotti y Gallo encabezaban el lento escrutinio. Como nadie superó el 50 por ciento, se votará otra vez el próximo domingo. La UCR aparecía segunda en los conteos.
› Por Felipe Yapur
La tranquilidad de los comicios en Tierra del Fuego se alargó en un escrutinio excesivamente lento. Con datos provisionales, al cierre de esta edición, la fórmula del oficialismo, integrada por los justicialistas Carlos Manfredotti y Daniel Gallo, aventajaba a los binomios del Frente Unidad Provincial, encabezado por el radical Jorge Colazo y el peronista adolfista Hugo Cóccaro, y al que presentó el Movimiento Popular Fueguino. Como ninguna de las fórmulas superó el 50 por ciento de los votos, el próximo domingo los fueguinos participarán del ballottage.
La posibilidad de que los electores puedan tachar a los candidatos que no son de su agrado demoró el recuento de los sufragios. Por ello, pasadas las 23 de ayer, la junta electoral apenas había escrutado 59 por ciento de las 257 mesas que tiene la provincia y la mayoría pertenecían a Ushuauaia. Los primeros datos mostraban a Manfredotti con el 31 por ciento de las voluntades y Colazo se mantenía en 21. Con estos guarismos, Manfredotti se mostró en la sede partidaria. Reconoció que la segunda vuelta era un hecho, habló de un triunfo para el próximo domingo, pero lo hizo con cautela. A diferencia de lo que sucedió hace cuatro años, esta vez el gobernador no cuenta con el apoyo del Movimiento Popular Fueguino (MPF), que anoche aún peleaba la segunda posición a escasa distancia de Colazo. Así que los próximos días serán cruciales al momento de conseguir adhesiones. “Compañeros, debemos convencer a los que no nos creyeron. Estoy seguro de que si redoblamos el esfuerzo, nos van a dar su voto”, aseguró el mandatario. A su turno, Gallo sostuvo que es optimista para el ballottage: “Estamos en una Argentina nueva y Tierra del Fuego no puede quedarse fuera de este destino”.
Más allá del escaso peso electoral de la provincia, unos 72.400 votantes que no representan ni el 1 por ciento del padrón nacional, los comicios significan para el gobierno de Néstor Kirchner una prueba importante. Gallo, el vicegobernador, es uno de los hombres más cercanos al santacruceño.
Con dos grados bajo cero y quien sabe qué sensación térmica, hay que querer mucho al candidato o a la democracia para salir a sufragar con un frío que atraviesa la ropa y hasta la piel. A las ocho de la mañana, cuando se habilitaron las mesas, en todo el territorio de la isla era de noche. Las calles estaban vacías, frías y húmedas. Sólo efectivos policiales, los fiscales y autoridades de mesas estaban en las escuelas. “Más entretenido estuvo Catamarca, ¿no le parece?”, preguntó sonriente Gallo a Página/12. Manfredotti, en tanto, permaneció en Ushuauaia, la capital provincial.
Las razones para que los dos miembros de la fórmula oficialista permanezcan en ciudades diferentes son múltiples, pero lo cierto es que la química entre ellos hace tiempo que está quebrada. Sucede que Manfredotti es uno de los pocos gobernadores que jugó siempre al lado de Carlos Menem, mientras Gallo fue un aliado incondicional de Kirchner casi desde el mismo momento en que el santacruceño comenzó a caminar el país. A partir del 27 de abril, Kirchner habla únicamente con Gallo y si no fuera por las necesidades políticas internas del PJ fueguino seguramente se hubiera modificado la integración de la fórmula. Tanto justicialistas como algunos dirigentes de la oposición aseguran que Gallo tracciona más votos que Manfredotti.
Durante todo el día, el Presidente prácticamente acosó a su hombre de la isla pidiéndole las encuestas de boca de urna. Cada vez que Kirchner llamaba desde su casa en Río Gallegos, en el comando electoral de Gallo corrían en busca de los últimos datos. Si bien consideraban que Ushuauaia es un distrito que favorece al PJ, en Río Grande el radical Colazo convoca más. Más que triunfar, el desafío de Gallo era entonces acercarse lo másposible al radical, que vive como él en esa ciudad, para así reducir las chances del actual senador en la segunda vuelta.
El candidato de la UCR llegó a su mesa a las ocho en punto y puso en duda la transparencia de los comicios. Habló de fraude, pero no abundó en detalles. Las críticas se centraron más que nada en el hecho de que la provincia dispusiera de vuelos charter para que llegaran a la isla estudiantes que residen tanto en la Capital Federal como en la provincia de Buenos Aires. Cerca de 750 estudiantes llegaron el sábado para emitir el voto más helado del país.
Si bien no triunfaron, casi los más contentos por los resultados eran los integrantes del ARI que se presentaban por primera vez en elecciones y conseguían un nada despreciable 12 por ciento. Fabiana Ríos, actualmente legisladora y candidata a gobernadora, sostuvo que “hay que tener en cuenta que sin aparato, sin dinero y con esfuerzo militante estamos construyendo un verdadero espacio opositor”.