El vicegobernador bonaerense, Gabriel Mariotto, y el jefe de Gabinete provincial, Alberto Pérez, continuaron ayer con la polémica que desataron las afirmaciones de la presidenta Cristina Kirchner, cuando el jueves pasado durante un acto en Lomas de Zamora afirmó que está “cansada de que la tomen por estúpida” frente a las críticas que recibe su gestión y las acusaciones al fallecido ex presidente Néstor Kirchner, en una clara alusión a dirigentes de su propio espacio político y que pareció tener a Daniel Scioli como principal destinatario. Aunque luego el gobernador también reclamó apoyo del Gobierno y aseguró que pese a las críticas no va romper con el kirchnerismo, Pérez salió a defender el estilo sciolista: Scioli “ha estado siempre” con el gobierno nacional, pero “desde su personalidad” y “siempre intentó sumar y tirar para adelante”. “Hay estilos más distantes y otros más comprometidos. A mí me gusta el estilo más comprometido”, replicó Mariotto.

“Si hay algo que no se le puede negar a Scioli es que ha estado siempre. Desde el 2003 hasta la actualidad, lo he visto siempre a Daniel al lado de Néstor (Kirchner) y de Cristina (Fernández)”, aseveró Pérez ante los planteos de la jefa de Estado por la “falta de compromiso” del gobernador con el proyecto kirchnerista. Según el jefe de Gabinete de Scioli, el gobernador estuvo al lado del kirchnerismo “en las elecciones seguras y en las que había incertidumbre, en los momentos buenos y en los malos”, aunque advirtió que Scioli –que ya manifestó su deseo de ser candidato presidencial para 2015– apoya “a su manera, con su estilo”, porque tiene “una trayectoria personal de años y una personalidad”.

Mariotto no esquivó la respuesta cuando lo consultaron por las declaraciones de Pérez. “Hay estilos más distantes y otros más comprometidos. A mí me gusta el estilo más comprometido. Yo no oculto lo que siento y trato de darle forma de acción a esa sensibilidad. A mí me gusta este estilo”, afirmó el vicegobernador, diferenciándose de Scioli. “Yo estoy profundamente identificado con el proyecto” del gobierno nacional, insistió Mariotto.

Volvió a tomar distancia de Scioli al señalar que “entiende” el reclamo de la Presidenta, porque cuando la mandataria “pide apoyo es al proyecto y no hacia ella”. En la misma dirección, Mariotto planteó que “la Presidenta no necesita nadie que la defienda” y, en un tiro por elevación a Scioli, Mariotto remarcó que él no oculta su apoyo al kirchnerismo.

En Lomas de Zamora, CFK fue muy dura con los dirigentes que no la “defienden de las críticas” y acusó a quienes “se hacen los idiotas” y “miran para otro lado” y que “quieren tener un millón de amigos”. Aunque sin nombrarlo, la Presidenta le apuntó a Scioli –presente en el escenario del acto– al señalar que “no se me ocurrió hacerme la estúpida” con las inundaciones en La Plata y reivindicó a los “compañeros que defienden un proyecto político” y les recomendó cuidarse “de esos que parece ser que nada les toca” y de los “traidores”.

En tanto, Scioli buscó salir del centro de las críticas y de bajarle el tono a la polémica. Desde Tandil y en declaraciones a la prensa, el gobernador dijo entender a la Presidenta y ensayó un reproche al gobierno nacional: “Yo también quisiera que me ayudaran más”. Pero aclaró que a pesar de las críticas no va a “romper con el kirchnerismo” y que con lo que rompe todos los días es “con las cocinas de paco y con la delincuencia”.