Un llamado telefónico vino a cambiarle la vida al intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde. La Presidenta lo quería como primer candidato a diputado en el distrito más importante del país. Luego vendría la reunión en la Casa Rosada. “Ella me pidió que sea lo mismo que soy en Lomas de Zamora y lo mismo que soy en la vida. Que ella hacía tiempo que venía siguiendo cómo trabajaba, que yo era un obsesionado por la gestión pública, y que era igual que en la vida: perseverante y luchador. Que era muy difícil encontrar en la política alguien que sea igual que en su vida personal”, explica ahora Insaurralde sentado en su despacho.

La antesala, el pasillo y el despacho funcionan como álbum fotográfico. De Néstor y Cristina Kirchner para abajo, Insaurralde aparece retratado con todos los dirigentes del oficialismo. También con artistas que pasaron por el municipio desde Serrat hasta los chicos de Casi Angeles, con gente vinculada al deporte como el técnico Julio Falcioni, que sacó campeón a su Banfield. En las fotos está con el pelo más largo y también cuando quedó calvo como consecuencia de la quimioterapia a la que debió someterse para tratar un cáncer, al que pudo derrotar sin dejar de atender los asuntos de su cargo. En esa historia puso especial énfasis la Presidenta al convocarlo. “Vos tenés valores, principalmente no tenés miedo para lo que se viene en la Argentina. Sos un tipo ya sin miedo por todo lo que te pasó y más porque ya eras así estructuralmente por todo lo que tuviste que luchar en Lomas”, cuenta el intendente que le dijo.

Insaurralde tiene de 43 años, es divorciado (de su matrimonio con Liana, hija del dirigente duhaldista Hugo Toledo), tiene tres hijos y aclara que está “solo”, dada la insistencia en las redes sociales a vincularlo sentimentalmente con famosas. En su discurso busca evitar las polémicas y mostrarse como un abanderado de la buena gestión.

–¿Qué piensa de la decisión de la Presidenta de designarlo como cabeza de lista siendo que no es de los dirigentes más conocidos del kirchnerismo en la provincia?

–Tiene que ver con ese análisis que ella hizo. Cuando llegué a Lomas tampoco era conocido, cuando inicié acá medía el 2 por ciento. Había que dejarme caminar, que me conociera la gente. Ahora hay que recorrer la provincia de Buenos Aires, rápidamente porque son pocos los días que tenemos de campaña. Hay que recorrer ciudad por ciudad, pueblo por pueblo, y ahí estaremos.

–Duhalde lo elogió y dijo que había militado con él durante 20 años. ¿Cómo es su historia en la política?

–No es así, pero no quiero polemizar. En 1987, yo era el secretario del centro de estudiantes de la ENAM (una Escuela Normal de Banfield) y comencé a militar. Luego estuve en el Centro Doctrinario, en la Juventud de la provincia y después pasé a la administración pública. En 2003, fui como candidato a primer concejal suplente de la lista del PJ y ahí comencé a trabajar en el municipio. Más que hacer política, en los primeros años me dediqué a la administración. Hace diez años acá no había ni teléfonos, el frente de la Municipalidad había sido incendiado. Veía que los procesos administrativos eran muy lentos, para sacar el registro perdías un día de tu trabajo, para hacer un trámite necesitabas conocer a alguien porque si no no te lo tomaban o te autorizaban la poda de un árbol cuando ya había pasado la primavera. Hoy cualquiera de esos trámites están simplificados, y los turnos se pueden pedir por Internet o por teléfono. Durante ese tiempo, despacio, también comienzo a militar.

–¿Cómo es su acercamiento al kirchnerismo?

–En 2007, cuando Jorge Rossi va por su reelección como intendente, yo voy como candidato a primer concejal ya con la lista de Cristina Kirchner. A los dos años renuncia Rossi y asumo. Ahí conozco a Néstor. Lo fui a ver a Olivos y me dijo: “Mirá, si tenés ganas de soñar, soñá; si no tenés miedo dale para adelante, el tren pasa una sola vez”. Yo me subí y acá estoy. Soy un hombre que cree que se pueden aprovechar las oportunidades, que no me gusta especular, que no pienso en mí solamente sino que pienso en un proyecto colectivo. Este es un proyecto colectivo de país con muchos aciertos y, por supuesto, con los problemas que hoy existen. Para algo elegimos ser servidores públicos, cuando yo estoy acá no digo que está todo bien.

–Se habló mucho en estos días sobre un supuesto desplazamiento de Daniel Scioli en la elaboración de las listas. ¿Cómo es su relación con el gobernador?

–Creo que está más en las especulaciones de los demás que en las de Daniel. Hablé con él todo este último tiempo: hablé el viernes, el sábado y el lunes al primer distrito que vino fue a Lomas de Zamora. Es ver su historia política, siempre fue consecuente con lo que dijo. En 2003 acompañó a Néstor Kirchner y siempre dentro de este proyecto nacional. Lo que pasa es que las críticas son a las formas, a los matices, a la foto. Es una coyuntura que a la gente no le produce ninguna cuestión porque no forma parte de la solución de la vida cotidiana. Por eso es un gobernador que tiene tan buena imagen. No están pensando en si se saca una foto con uno u otro, lo que necesitan es que resuelva las cosas estructurales de la provincia, que faltan un montón.

–¿Considera una buena gestión la de Scioli?

–Sí, por supuesto. Con mi visión. En el tema inseguridad yo apuesto a construir con la policía local. Hace falta que un intendente se haga cargo de la policía preventiva del distrito. En un tema tan multicausal, nosotros tenemos que accionar desde un municipio con la policía preventiva y en conexión con la Justicia.

–¿Entonces promueve la creación de policías municipales?

–Exactamente. Scioli tiene diferentes argumentos en una de las leyes que se han presentado. Será un tema de debate. Los intendentes decimos que si vamos a ser responsables de estas cuestiones, queremos tener todas las garantías que tienen que ver con el financiamiento, la capacitación, con la conducción de esa fuerza.

–Hay opositores que aseguran que a los municipios les va mal con el kirchnerismo. ¿Cuál es su experiencia?

–Es muy a favor de los municipios. Es muy fácil, es mostrar todo lo que hicimos. Seguramente hay gente a la que le falta, pero nunca nos tenemos que olvidar de dónde venimos. A Lomas de Zamora le fue muy mal durante dos décadas y en esta última asfaltó 1300 cuadras contra las menos de mil de los anteriores veinte años. Tenía el 22 por ciento de agua potable y hoy tiene el 95 por ciento. Son datos de la realidad.

–¿Cuáles van a ser los temas de la campaña?

–La inseguridad y el sostenimiento de precios. Cuando se lanza un programa para mirar y cuidar los acuerdos de precios conseguidos no se hace para defender al Gobierno, es para defender el salario de la gente. Acá hay paritarias libres como en pocos lugares del mundo y se trabaja en eso, en defender el salario. La idea es que los precios se incrementen menos que los salarios.

–¿Y el tema de la Justicia, con el que la Presidenta insiste tanto?

–Coincido en todo lo que tiene que ver con la transparencia del Estado. Mostrar un Estado ágil, dinámico, rápido, eficiente. Como para que lo entienda la gente, porque a Tribunales no sólo van los juristas. A Tribunales también va una mamá que se le fue el marido, se separaron, tiene dos nenes y tiene que cobrar su cuota alimentaria. Ella está desamparada totalmente, porque va a Tribunales, el tiempo, la burocracia, se sienta, espera. . Por ahí está un año y no sabe quién tiene que fallar. Acá se sabe que el responsable de Lomas de Zamora es Martín Insaurralde. Pero esa señora que por ahí necesita 500 pesos para comprar los alimentos de su hijo, sólo sabe que hay un edificio gigante en el que camina gente. Eso forma parte de democratizar la Justicia, es saber qué hace cada uno, qué fallan. Tener acceso a la información. Es un tema claro, porque si no se habla que “quieren la Justicia para poner sus jueces”. Así le explicamos a la gente la idea de lo que queremos.

–Más allá de los jueces también se está discutiendo el rol de la Corte Suprema que falló en contra de la elección popular de los consejeros. Aníbal Fernández dijo que más que independiente era una Corte opositora. ¿Usted qué opina?

–Soy muy respetuoso de la Justicia. Lo que hizo Néstor Kirchner fue armar una Corte lo más democrática posible. Hoy hay que respetarla, formamos parte de este gobierno que eligió y cambió los miembros de la Corte.

–Finalmente el intendente de Tigre, Sergio Massa, se presentó como candidato de una lista por afuera del Frente para la Victoria. ¿Qué opina de su discurso, que dice que no es oficialista pero tampoco antikirchnerista?

–Los oficialistas son los que están en esta lista del Frente para la Victoria que a mí me toca presidir, el resto... escucharemos la propuesta. Sólo vi a (Francisco) De Narváez un poco en televisión, de los demás no he escuchado las grandes propuestas que la sociedad está esperando. Nosotros tenemos para mostrar nuestra gestión y hacia dónde queremos ir en el futuro. Está muy bien que haya distintas propuestas electorales.

–Massa dice que también puede mostrar su gestión en Tigre.

–No estudié la gestión de Tigre, por lo que se ve en los medios de comunicación parecería que sí. Yo sé de dónde salió Lomas de Zamora, del fondo donde estaba este municipio que no es rico en materia económica.

–¿Opina que le falta definirse sobre los temas nacionales?

–Sí, pero no hablo sólo de uno. Me gustaría escuchar a todos los precandidatos que digan qué es todo lo que hicimos mal y cómo lo van a mejorar. Y si hicimos alguna cosa bien, porque pareciera que hicimos todo mal. La gente no dice eso. La gente quiere escuchar nuevas propuestas y hacia dónde va su futuro.

–Usted ya planteó que la Presidenta tiene vedada otra reelección, o por lo menos los medios le tomaron esa declaración.

–Es lo que la Constitución marca. Me preguntaron qué pensaba y dije que pensaba lo mismo que la Presidenta. Ella dijo que no es eterna. Yo hablo todos los días desde el sábado con ella y sólo con temas de trabajo en agenda. En la agenda de la Presidenta está la agenda de la gente, la resolución de los problemas cotidianos de cada uno.