En un acto al aire libre y en su propio bastión electoral, Sergio Massa lanzó ayer su campaña y la presentación de los candidatos del bonaerense Frente Renovador, con un “compromiso público de fuego”: que sus diputados “no avalarán en el Congreso” ninguna iniciativa “de reforma de la Constitución Nacional ni de reelección indefinida”. Una respuesta del intendente de Tigre a los distintos sectores de la oposición que lo señalan como “el caballo de Troya del kirchnerismo”, al tiempo que defendió la amplísima variedad ideológica de su lista como “la unidad en la diversidad, como bien define el papa Francisco, en la concordia”. Solo desde el escenario, con una enorme pantalla gigante detrás que replicaba su logo de campaña y frente a sus seguidores sentados, Massa sostuvo que “queremos construir sin destruir”, dijo que defenderá “con uñas y dientes” la Asignación Universal por Hijo que implementó el gobierno nacional, “la inclusión jubilatoria” y que no dará “ni un paso atrás” en la política de derechos humanos. De la misma manera que propuso “una Corte cada vez más independiente”, combatir la inflación y realizar un “acuerdo social” entre empresarios, trabajadores y el Estado.

“Llegó el día, llegó la esperanza”, decía la frase con que cerró el cuidado video que precedió al discurso de Massa y que retrasmitían en directo los canales de noticias. Allí se repasó con fotos familiares “la historia de un tipo común que soñó algo grande”, luego sus apariciones mediáticas y definiciones en su derrotero como funcionario público (no incluyó su paso como jefe de Gabinete de Cristina Kirchner), “que llenó la política de aire fresco” y “te hinchó los pulmones de esperanza”. “No queremos hacer campaña con slogans fáciles”, agregó Massa ya arriba del escenario, donde fue el único orador.

Desde allí defendió la “diversidad” de sus candidatos, que reúnen a peronistas, duhaldistas, radicales, ex lilitos, empresarios, productores agropecuarios y representantes de “cuatro centrales sindicales”, según señaló el propio intendente de Tigre. “Somos la unidad en la diversidad, como bien define el papa Francisco, en la concordia, en la paz”, agregó Massa, quien en el mismo tono ecuménico prometió “devolver cada agresión, insulto e injuria con un proyecto”.

Se encargó de ratificar el compromiso de sus diputados, “que firmarán ante escribano público”, para “rechazar la reforma de la Constitución Nacional y la reelección indefinida”, como se lo reclamaba el resto del arco opositor, que lo acusaba de kirchnerista. Luego reivindicó su condición de peronista al recordar al “(Juan) Perón más sabio, el del abrazo con (el radical Ricardo) Balbín”. También afirmó que “hay una sola clase de hombres: los que trabajan” para luego proponer un “acuerdo social” entre “el mundo de la empresa, los trabajadores y el Estado”.

Desde el atril, Massa dijo que defenderá la AUH, la inclusión jubilatoria (“por la cual trabajamos”) y que no dará “ni un paso atrás” en la política de derechos humanos. Al mismo tiempo, propuso una serie de proyectos propios que dijo que llevará al Congreso “con respaldo político y económico” para hacerlos realidad.

Allí insistió en “atacar a la inflación”, a la que consideró “un cáncer”; proclamó una reforma tributaria que reduzca el Impuesto a las Ganancias y que se aplique a la renta financiera; afirmó que “ya es tiempo de descentralizar en seguridad” para dar paso a la creación de la policías municipales “con el intendente como jefe de la policía”; y reclamó la instalación de un juez de garantías en cada una de las ciudades de la provincia “sin necesidad de dividir” los actuales departamentos judiciales. Una lluvia de papelitos cerró el discurso de Massa, entre aplausos de sus seguidores y la canción “Celebra la vida”, de Axel, que sonaba como himno de campaña.