Los piqueteros del Movimiento Teresa Vive, que tenían previsto acampar en la Plaza de Mayo, llegaron a un acuerdo con el Gobierno por los planes de empleo en reclamo, por lo que levantaron su protesta. Durante la tarde los desocupados habían llegado a armar algunas carpas en los canteros ubicados frente al Cabildo y la Catedral, donde pensaban pasar la noche. Una delegación fue recibida por el ministro del Interior, Aníbal Fernández, tras lo cual anunciaron que los motivos que originaron la medida de fuerza estaban “en vía de solución”.
“El pedido fundamental que teníamos era que se diera respuesta a las familias que se habían inscripto en su momento en el plan Jefas y Jefes de Hogar, pero no pudieron cobrarlo”, dijo anoche Gustavo Giménez, titular de la agrupación. En la reunión en la Casa Rosada participaron, además, la legisladora porteña Vilma Ripoll y un grupo de dirigentes barriales.
El Movimiento Teresa Vive es la línea piquetera del Movimiento de Trabajadores al Socialismo (MST). La organización es la única que no se reunió con Kirchner (fue recibida en cambio por funcionarios del gabinete social) y tiene un poder de movilización relativo, ya que no coordina sus planes de lucha con ninguno de los dos sectores piqueteros, ni con la CTACCC ni con el Bloque Piquetero. La situación la llevó a quedar relegada en sus pedidos.
Por otra parte en La Plata y el conurbano la CTD Aníbal Verón realizó cortes de ruta para reclamar a la gobernación bonaerense el pago de planes caídos y la acreditación de nuevos. “Los piquetes se llevaron a cabo en Esteban Echeverría, Lanús, Tigre, Malvinas Argentinas y Quilmes”, detalló Gustavo Franquet (Quebracho).
La CTD tiene previsto retomar las protestas en los mismos lugares a partir del lunes. Sus dirigentes señalaron que hubo un acuerdo incumplido con la provincia por el ingreso de 800 nuevos beneficiarios, a lo que se sumó la suspensión de otros que ya venían cobrándolo.