“La mentira y la difamación parecen no tener fin”, señala un comunicado del secretario general de la Presidencia, “por expresas instrucciones de la primera mandataria” y que lleva la firma de Oscar Parrilli. En duros términos, el comunicado muestra que para realizar la serie de denuncias sobre las propiedades de Néstor y Cristina Kirchner que publicaron el diario La Nación y el Grupo Clarín en los últimos días no se tuvo en cuenta las reiteradas declaraciones juradas de ambos. Allí figura desde siempre como propiedad de los Kirchner la Hostería Las Dunas. La Nación había afirmado que el inmueble no estaba declarado.

El comunicado señala que “no es la primera vez, ya que (Néstor y Cristina Kirchner) durante muchos años han recibido y siguen recibiendo un tratamiento injuriante por parte de estos medios”. Y que “la Hostería Las Dunas, que corresponde a un nombre de fantasía, es la denominación que se le asigna al inmueble identificado como C1A, en la localidad de El Calafate, Provincia de Santa Cruz. Que este inmueble fue declarado por el Presidente Néstor C. Kirchner desde su adquisición en febrero del año 2008, tanto en las Declaraciones Juradas presentadas ante la AFIP como en la Oficina Anticorrupción.”

En el artículo de La Nación se afirma que “por lo menos en los papeles, Báez figura como dueño del establecimiento y Kirchner jamás lo declaró ante la Oficina Anticorrupción”.

El secretario general de la Presidencia agrega que “a partir del fallecimiento del Presidente Néstor Kirchner, dicho inmueble está incluido en la Declaración Jurada que la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner presenta anualmente ante la AFIP y ante la Oficina Anticorrupción, siempre en el porcentaje que le corresponde debido al carácter ganancial que el bien tuvo”.

Con respecto a las rentas por la locación de ese inmueble por la firma Valle Mitre S.A. que se mencionan en el artículo de La Nación “también han sido declaradas dentro del conjunto de rentas por locación de inmuebles del Ex Presidente Néstor Kirchner ante los organismos indicados precedentemente. Que desde la declaratoria de herederos, la Presidenta de la Nación declara los ingresos de esta locación, en el porcentaje que le corresponde de dicha renta.”

Agrega que “el diario La Nación desconozca las normativas fiscales en cuanto a la forma de declarar un inmueble, que debe hacerse correctamente indicando su ubicación geográfica y no por su nombre de fantasía, no puede sino merecer el mayor de los repudios ya que evidencia una deliberada mala intención de generar confusión y un manto de sospecha, como es la idea que se ocultaba u omitía declarar este inmueble.”

“Desde Skanska –señala–, hasta bóvedas gigantes donde se almacenaban miles de millones de euros o dólares, pasando después a viajes “misteriosos” a exóticos paraísos fiscales –que se publicaban en el Boletín Oficial de la Nación–, y ahora a bienes y rentas que figuran declarados desde el año 2008 tanto en las declaraciones juradas presentadas ante la AFIP y ante la Oficina Anticorrupción, y por los que además se tributaron y tributan impuestos; la mentira y la difamación parecen no tener fin.” En este sentido, puntualiza que “ambos Presidentes han sido los más denunciados por las empresas mediáticas, dirigentes opositores, ONG o ignotos personajes y han sido investigados como ningún otro ciudadano por la justicia argentina. Lo curioso y llamativo es que siempre las denuncias NO versan sobre bienes ocultos que de repente alguien descubre, sobre cuentas o bienes en el exterior no declarados, o por niveles de vida que no se condicen con sus ingresos. Al contrario, siempre fue sobre lo que figura en sus propias declaraciones juradas, presentadas y firmadas por ambos y en base a las cuales se abonaron todos los impuestos.”

“Sería bueno que estos medios –afirma por La Nación y el Grupo Clarín–pusieran el mismo celo investigativo respecto de las declaraciones juradas de los dirigentes y funcionarios de todo el arco político y de todos los Poderes del Estado. Sería bueno que alguien también comparara lo que ambos pagaron de impuestos con lo abonado por otros dirigentes cuyo nivel de vida, propiedades, viajes al exterior, etcétera, no se compadece, ni mínimamente, con lo que declaran. Sin tener en cuenta que muchos de ellos nunca presentaron una declaración jurada.”

Finalmente, el comunicado indica que “el diario La Nación y el multimedio de Magneto (Clarín, TN, Radio Mitre, etcétera), nuevamente han mentido, al mejor estilo del fascismo: miente, miente que algo quedará.”

Por otra parte, Lázaro Báez presentó ayer un escrito en la Justicia Federal de Santa Cruz para pedir que se lo investigue por el supuesto pago millonario al matrimonio Kirchner por el alquiler de sus hoteles en el sur, tal como salió publicado en el mismo artículo de La Nación.