El diputado del PRO Federico Pinedo consideró que la Argentina fue tratada en los tribunales estadounidenses “peor que cualquier empresa o persona” y que la declararon en default “a pesar de su solvencia” económica, pero igual argumentó que “hay que cumplir la sentencia, por más absurda que parezca”. En tanto, los precandidatos presidenciales del FA-Unen reclamaron la “interpelación” del ministro de Economía, Axel Kicillof, en el Congreso, aunque no pudieron ocultar sus propias diferencias internas.

El macrista Pinedo afirmó que el trato que recibió Argentina en el litigio con los fondos buitre “ha sido mucho peor que el que habría recibido cualquier empresa o persona en iguales circunstancias”. En una columna de opinión publicada en el diario español El País bajo el título “La quiebra del país solvente”, Pinedo definió como “paradójica” la situación en la que se declara el default de la Argentina. En otro párrafo, Pinedo se remontó a tiempos en que el país bajo el default sufrió “miseria, pobreza, postergaciones y exclusión”, y subrayó que hoy la Argentina “es solvente y tiene un enorme potencial de desarrollo inmediato” y que la situación actual, “hoy tan dramática, será un mal recuerdo”. De todas maneras, el diputado se alineó con su jefe político y –a pesar de los argumentos volcados en la nota– terminó considerando que “hay que cumplir la sentencia, por más absurda que parezca”, y recomendó que “más adelante habrá que analizar las responsabilidades de cada uno en este resultado insólito”.

Tres de los cinco precandidatos presidenciales de FA-Unen, los radicales Julio Cobos y Ernesto Sanz y el socialista Hermes Binner se mostraron juntos en la localidad jujeña de Humahuaca durante la fiesta de la Pachamama y reclamaron al unísono la “interpelación” del ministro de Economía, Axel Kicillof, en el Congreso para conocer la estrategia del Gobierno para resolver el conflicto con los fondos buitre, pese a que el ministro viene hablando en extenso sobre la cuestión.

“Estamos dispuestos a colaborar para salir de esta situación, pero necesitamos certezas”, dijo Cobos. “No sabemos qué es lo que quiere hacer el Gobierno: si tiene intenciones de cumplir la sentencia o no, si traslada esto a enero y es un mal escenario, porque lo peor que puede hacer es mantenerse en esta incertidumbre”, agregó el ex vicepresidente.

El titular del Comité Nacional de la UCR, en tanto, se mostró más confrontativo. “No sabemos cuál es el papel de los banqueros argentinos”, dijo Sanz y consideró que “lo que vemos es que hay una enorme hipocresía y contradicción en el gobierno”. Binner le apuntó al jefe de Gobierno porteño –diferenciándose de paso de sus aliados radicales– al recordar que Mauricio Macri propone pagar a los holdouts y “nosotros no estamos de acuerdo, estamos en contra del pago”. “Hay una posición firme de defender el diálogo. Es la única forma de compatibilizar el pago”, agregó (ver página 10).

A la distancia, otro presidenciable del FA-Unen, Fernando “Pino” Solanas afirmó desde Buenos Aires que “el gran fracaso del Gobierno en la política de desendeudamiento quedó demostrado en la presente crisis con los fondos buitre”. “Tanto Kirchner como Lavagna fueron responsables de haber cedido, en 2005, la jurisdicción a tribunales extranjeros y así tomó el mando el juez Griesa. El Gobierno tampoco se anticipó a posibles represalias por parte de los bonistas que no entraron en los canjes de 2005 y 2010, tal como ha sucedido”, reiteró Solanas.