Desde que se conocieron los resultados obtenidos por el radicalismo en las últimas elecciones bonaerenses, hablar sobre la UCR parece estar de moda. Partidarios y opositores cruzan declaraciones donde teorizan si los votos conseguidos en algunas provincias como Chaco, Río Negro o Catamarca significan la superación de su crisis. “Hay que ser humildes, la reconstrucción partidaria va a llevar bastante tiempo”, aseguró Federico Storani, titular del radicalismo bonaerense, distanciándose del presidente del Comité Nacional, Angel Rozas. El ex presidente justicialista Eduardo Duhalde también opinó sobre la situación que atraviesa el radicalismo sobre la que vaticinó que “la UCR volverá a sus carriles”.
Algunos de los últimos resultados electorales siguen sembrando optimismo en las filas radicales. La conservación de las gobernaciones de Catamarca, Chaco y Río Negro, el arrebato de Tierra Fuego al PJ local, y la cercanía de las internas que renovarán a sus autoridades partidarias terminó con el silencio en el que habían caído las principales figuras de la UCR tras el abandono presidencial de Fernando de la Rúa en diciembre de 2001.
Uno de los que salió a hablar ayer fue el líder bonaerense del partido, Federico Storani, en un intento de diferenciarse del chaqueño Angel Rozas, el candidato favorito para continuar al frente de la conducción nacional. “Hay que ser muy humildes en este momento, el resultado en los comicios bonaerenses solamente es un primer ladrillo de una reconstrucción que va a llevar bastante tiempo”, dijo el alfonsinista en respuesta a las entusiastas declaraciones de Rozas, en las que señaló que la UCR está en condiciones de gobernar el país. Para el diputado electo, en cambio, la actual situación de su partido es sólo el comienzo de una recuperación. Sus palabras reflejan tal moderación: “No estamos conformes ni estamos para descorchar champaña”, afirmó Storani y aclaró que “simplemente estamos animados porque algunos nos daban por muertos”.
La recuperación del radicalismo también es tema de conversación dentro del justicialismo. Su referente bonaerense, Eduardo Duhalde, consideró que tras la crisis que sufrió con la ruptura de la Alianza “la UCR volverá a sus carriles y recuperará su vigencia” para volver a ocupar un rol de oposición ante el gobierno de Néstor Kirchner, a quien le cuestionan la posible conformación de un poder hegemónico tras los últimos resultados provinciales.