EL PAíS
› POR PRIMERA VEZ DESDE SU FUGA, HACE UN ACTO FUERA DE LA RIOJA
Menem busca resucitar en el conurbano
› Por Diego Schurman
Ya están el día y la hora. Será el próximo miércoles a las 8 de la noche. En una cena convocada por sus amigos, Carlos Menem buscará retornar al centro de escena después de un obligado bajo perfil. Y lo hará en tono de confrontación, ya que anunciará en plena provincia de Buenos Aires su decisión de competir en la interna partidaria.
Menem desembarcará en las tierras de Eduardo Duhalde por obra y gracia de Alberto Kohan y su tropa bonaerense. Con la excusa de conmemorar un nuevo aniversario del nacimiento de Perón, el menemismo le rendirá un homenaje al “amigo, jefe y conductor”, según pregonaron a los cuatro vientos.
En la calle Rolón 888, esquina Avellaneda, de San Isidro, Menem recibirá el calor de 250 invitados. Y aprovechará la tribuna para anunciar que disputará la titularidad del peronismo, según anticiparon en su entorno. Al cargo le han sido esquivos Duhalde y también Néstor Kirchner. Pero no para cedérselo a Menem.
Duhalde cree que lo más conveniente es que el actual Presidente se haga cargo del PJ. No tanto por esa regla tácita de que el conductor del país debe ser el del peronismo como por buscar la manera de poner freno a los intentos de Kirchner de construir por afuera del partido. Es justamente por ese sueño de trascender el PJ con un esquema de “transversalidad política” que el santacruceño no quiere saber nada con el puesto.
Este sordo conflicto entre Duhalde y Kirchner es motivo de acalorados debates en el justicialismo. Pero en pos de mantener la sociedad “anti Menem”, se viene especulando con la posibilidad de una salida salomónica catapultando en la presidencia del PJ a Eduardo Fellner.
El reelecto gobernador jujeño es actualmente titular de la Comisión de Acción Política, una suerte de conducción paralela que el duhaldismo y el kirchnerismo crearon tiempo atrás para desconocer la autoridad formal de Menem.
Desde que desistió de participar en el ballottage, Menem no dio demasiadas pistas de sus acciones futuras. Recién en esta semana, en La Rioja, dejó entrever que volverá al redil.
“Menem ya dio indicios de lo que va a hacer. Y todos los que estemos en la cena vamos a dejar en claro que lo vamos a acompañar. No estamos muertos y creemos que tenemos que seguir participando activamente y pelear por un espacio”, señaló el bonaerense Juan Carlos Cobas.
Cobas siempre le disputó, sin mayor éxito, el poder al duhaldista Manolo Quindimil en Lanús. Y es uno de los referentes del Frente por la Lealtad, donde se agrupa el menemismo bonaerense que responde a Kohan. Otros apellidos que estarán presentes en San Isidro serán el ex senador Alberto Oliva, el ex concejal de Tres de Febrero Horacio Alonso y el ex presidente de Racing Daniel Lalín.
El menemismo provincial quedó hecho añicos tras la decisión de Menem de no participar en la segunda vuelta. Básicamente por las fuertes internas entre Kohan, Alberto Pierri y Luis Patti, los principales referentes del distrito. Este último finalmente se quedó sin el respaldo de los otros dos en sus aspiraciones para gobernador.
El propio Frente por la Lealtad de Kohan quedó huérfano de candidato, ya que un grupo tenía decidido apoyar como gobernador a Aldo Rico, y otro al ex funcionario aliancista Hernán Lombardi. Los muchachos de Kohan esperan ahora que Menem dé una señal para empezar a reconstruir el poder perdido en el distrito bonaerense.
El “homenaje” a Menem estaba programado originalmente para el 17 de octubre. Sus amigos buscaban devolverle protagonismo ni más ni menos que el Día de la Lealtad Peronista. Pero un problema de agenda terminó adelantando la cita para el próximo miércoles.
Hasta ese día, el ex presidente igualmente aparecerá en los diarios, pero ya no por sus ambiciones políticas sino por sus presuntas vinculaciones con el atentado a la AMIA.