El Gobierno está en estado de gracia y eso lo saben los candidatos a algún cargo que, tanto antes como después de la elección, buscan la manera de acercarse al presidente Néstor Kirchner. Ayer, el flamante intendente de Córdoba por el Partido Nuevo, Luis Juez, dijo que la resonante victoria que obtuvo el domingo también es un poco del Presidente porque “lo que pregona, de construir por encima de los aparatos y por arriba de las estructuras y de manera transversal, nosotros lo hemos hecho”. En la Rosada respondían que el triunfo de Juez era bien recibido dentro de la filosofía del armado transversal, aunque el desparpajo del ex fiscal y su discurso antipolítica creaban algunas dudas sobre el personaje.
En una visión bien optimista, cerca del Presidente evaluaban que toda la elección cordobesa les resultaba provechosa. En la capital, porque pese a que Kirchner había apoyado en la última semana al oficialista Alfredo Keegan, la victoria de Juez sirve de freno a las aspiraciones hegemónicas en la provincia del gobernador José Manuel de la Sota, quien cultiva con la Rosada una relación distante. Además, como ya está dicho, Juez, un peronista disidente, podría entrar en el armado transversal kirchnerista que cuenta ya con otros dos intendentes de grandes ciudades como el porteño Aníbal Ibarra y el socialista rosarino Roberto Lifschitz.
Pero también consideraban que estaba muy bien que el justicialismo se hubiera impuesto en el resto de los rubros en juego en la provincia, porque esos senadores y diputados se integrarán al bloque oficialista.
El PJ cordobés renovó las dos bancas de senador que puso en juego al obtener el 36 por ciento de los votos contra el 28,4 por ciento del Frente Nuevo y el 19,7 por ciento de la UCR. De esta forma, el partido de Juez se quedó con el escaño de la minoría que ocupaba el radicalismo. En Diputados, el justicialismo obtuvo un ajustado triunfo por 32,5 por ciento contra el 30,8 del Partido Nuevo, lo que le permitirá ocupar cuatro bancas de diputados, mientras que otras tres serán para el PN y sólo dos irán para el otrora poderoso radicalismo de Córdoba.
Por otro lado, se renovó la totalidad de la Legislatura provincial unicameral de 70 miembros. Y si bien el justicialismo se impuso también en este rubro, las 36 bancas que consiguió significan una pérdida de cinco lugares en el cuerpo, mientras que el fulgurante debut del Partido Nuevo le permitió alzarse con 18 escaños.
La buena elección de las listas de Juez les permitirá a varios trabajadores de prensa incursionar en el trabajo legislativo, como en los casos del periodista televisivo y radial Ricardo Fonseca y de Mónica Gutiérrez, ex colaboradora de Página/12. En tanto que el basquetbolista de Atenas, Héctor “Pichi” Campana, será concejal en la capital provincial.