EL PAíS
› ENCUENTRO DE ANIBAL IBARRA CON EL CORDOBES LUIS JUEZ
El comienzo de una amistad
El jefe de Gobierno y el electo intendente se conocieron ayer.Ibarra destacó el contenido político de la reunión y Juez, la “sintonía” entre ambos. La transversalidad. Pelea con De la Sota.
› Por Santiago Rodríguez
Los dos se conocían sólo de haberse visto por televisión, pero un único llamado telefónico les resultó suficiente para arreglar un encuentro cara a cara. Así fue como Aníbal Ibarra y Luis Juez se reunieron ayer en la Jefatura de Gobierno de la Ciudad. “Este saludo tiene un claro contenido político”, admitió Ibarra con el flamante intendente electo de Córdoba sentado a su lado y lo elogió por “haberse enfrentado a los aparatos partidarios con un trabajo que se basó en un fuerte vínculo con la sociedad cordobesa”. Juez dijo haber “encontrado una gran sintonía” con el jefe de Gobierno porteño y volvió a marcar distancias con el gobernador de su provincia: “Si esperan que el reencuentro con (José Manuel) De la Sota –declaró– pueda ser un capítulo de ‘Son amores’, eso es imposible.”
En las elecciones del último domingo, Juez se convirtió en el primer dirigente capaz de romper el bipartidismo peronista-radical que predominó en Córdoba desde el retorno a la democracia. De origen peronista, Juez ganó la intendencia de la capital provincial con alrededor del 60 por ciento de los votos a la cabeza del Partido Nuevo y su triunfo le impidió a De la Sota alzarse con el monopolio del poder provincial.
Para De la Sota la derrota por paliza de Alfredo Keegan, a quien apostaba sus fichas como intendente cordobés, tuvo un ingrediente que la hizo aún más amarga: Juez cobró vuelo político después de que el gobernador lo echara de la Fiscalía anticorrupción en la que él mismo lo había nombrado. El gobernador lo separó de ese cargo molesto con su decisión de investigar a funcionarios de su gobierno. A partir de entonces Juez empezó a cobrar popularidad y capitalizó el fastidio de los cordobeses con los partidos tradicionales.
El encuentro entre Ibarra y Juez no estaba previsto en la agenda de ninguno de los dos. De hecho, el jefe de Gobierno porteño lo llamó para felicitarlo y después del saludo de rigor le dijo que cuando viniera a Buenos Aires quería que se juntaran para conocerse personalmente. “Yo estoy acá, así que si me decís un lugar y una hora nos vemos hoy (por ayer) mismo”, le respondió el intendente electo de Córdoba. Un par de horas más tarde ambos estaban reunidos en la Jefatura de Gobierno de la Ciudad.
La reunión entre Ibarra y Juez duró menos de una hora. “Cada dos palabras que decía hacía un chiste”, contaron los colaboradores de Ibarra que estuvieron en el encuentro. El tiempo fue suficiente para que el cordobés exhibiera el sentido del humor que lo caracteriza, pero también para que ambos hicieran un repaso del escenario político nacional.
En la Jefatura de Gobierno de la Ciudad contaron que el intendente electo de Córdoba dijo compartir “el marco general” de la gestión del presidente Néstor Kirchner y que se declaró contrario a las formas tradicionales de hacer política y a las estructuras partidarias. Por tratarse de un primer encuentro no hubo mayores definiciones políticas que ésas, pero tanto Ibarra como Juez quedaron en profundizar la relación y uno de los puntos que tocaron fue la posibilidad de establecer algún marco de acción conjunta en el Congreso. El partido del cordobés consiguió el último domingo tres bancas en la Cámara de Diputados.
En el marco de la tan mentada transversalidad, en la Casa Rosada esperan de Ibarra que articule en un mismo espacio a todas las expresiones de centroizquierda. Juez podría convertirse en una pieza clave de ese armado político, como así también el intendente electo de Rosario, el socialista Miguel Lifschitz.
El primer contacto con el cordobés quedó establecido y a la luz de sus declaraciones fue auspicioso. Juez aseguró haber encontrado en el porteño “una gran sintonía en cuestiones que tienen que ver con un pasado común, en como vislumbrar el futuro y en como plantear algunas cuestiones de gobierno”. También señaló que en la reunió surgió “un vínculo que, seguramente, con el tiempo será mucho más sólido y personal”. Ibarra sostuvo que el triunfo de Juez en Córdoba demuestra que “cuando se busca el apoyo y la conexión con la sociedad se obtienen buenos resultados” y lo elogió por “haberse enfrentado a los aparatos partidarios con un trabajo que se basó en un fuerte vínculo con la sociedad cordobesa”. Además de recordar “el pasado común” que los dos tienen como fiscales, el jefe de Gobierno porteño también vaticinó que van a mantener “vínculos en materia de gestión porque gobernamos dos de las tres ciudades más importantes del país que tienen problemas en común”.