Dice la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires que para acceder a la Jefatura de Gobierno en la primera vuelta electoral hay que conseguir la mitad más uno de los votos. Es una vara tan alta que hasta ahora ningún mandatario porteño consiguió superarla y el propio Horacio Rodríguez Larreta, candidato del PRO y el mejor posicionado de los cinco que hoy compiten por suceder a Mauricio Macri, dijo creer que esta vez también será necesario un ballottage. Detrás de él disputan un boleto a esa eventual segunda vuelta el kirchnerista Mariano Recalde y Martín Lousteau en nombre de ECO, una alianza en la que confluyen el radicalismo y la Coalición Cívica, que a nivel nacional son socios del macrismo. Los postulantes de izquierda Myriam Bregman y Luis Zamora completan la oferta para unas elecciones en las que se votará también para renovar la mitad de la Legislatura y las autoridades de las comunas y que marcarán el debut la boleta única electrónica, un sistema que plantea dudas en cuanto a su seguridad.

Estas elecciones porteñas, las sextas que se realizan desde que se modificó la Constitución nacional y quien gobierna la ciudad dejó de ser elegido a dedo por el Presidente, trajeron varias novedades. Una de ellas fue la implementación de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias como mecanismo de selección de los candidatos. La otra es la boleta única electrónica.

Cuando hoy vayan a votar, los porteños no se encontrarán con las boletas con las que siempre lo han hecho. En su lugar habrá esta vez una computadora en la que ellos mismos imprimirán los nombres de sus elegidos en una boleta única que les entregará el presidente de mesa. Además del registro impreso, que servirá de reaseguro para el recuento definitivo de los votos, la información quedará almacenada en un chip que tendrá cada una de las boletas y será utilizado para el escrutinio provisorio.

El conteo electrónico de los votos agilizará el trámite y las autoridades electorales porteñas estiman que a las ocho y media de la noche ya se conocerá el resultado de las elecciones. Como contrapartida, la novedad podría complicar el desarrollo de los comicios. A pesar de que el gobierno porteño intensificó en los últimos días la campaña para explicar cómo es el mecanismo, no todos llegarán a su mesa sabiendo de la nueva modalidad de votación, por lo que se supone que votar puede llevar esta vez más tiempo que en anteriores elecciones. A eso se suman las dudas sobre la vulnerabilidad del sistema. Desde la gestión macrista insistieron ayer en que es absolutamente fiable, pero expertos informáticos descubrieron “agujeros de seguridad” y sostienen que el recuento electrónico puede ser adulterado para sumar más votos que los emitidos. Por eso, recomiendan contar los sufragios a mano y no confiar en la información almacenada en el chip que tiene cada boleta.

De los 30 precandidatos que se presentaron para la Jefatura de Gobierno a las primarias del 26 de abril, sólo 5 superaron el piso del 1,5 por ciento de los votos que es necesario obtener para poder participar de las elecciones generales. A Rodríguez Larreta lo acompaña como candidato a vicejefe de Gobierno el senador Diego Santilli, uno de los referentes de la pata peronista del PRO. El compañero de fórmula de Lousteau es Fernando Sánchez, uno de los dirigentes más cercanos a la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, quien en vísperas del cierre de la campaña electoral sorprendió diciendo que el ex ministro de Economía no es su candidato. Recalde lleva de vice al referente de la agrupación radical Los irrompibles, Leandro Santoro, como expresión del armado diverso y plural que el Frente para la Victoria se plantea en el distrito. A Bregman, del Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), la secunda el economista José Castillo; y Zamora, de Autodeterminación y Libertad, se presenta junto a Sergio Sallustio.

Rodríguez Larreta derrotó a Gabriela Michetti en las primarias. La interna dividió al PRO, pero entre ambos sumaron casi un 48 por ciento de los votos que el jefe de Gabinete –y favorito de Macri para su sucesión– parece conservar para las generales de hoy. Lousteau ganó la pulseada en ECO, que con tres precandidatos reunió el 22,48 por ciento de los votos. El Frente para la Victoria rozó el 19 por ciento en una primaria en la que Recalde se impuso con contundencia a los otros seis precandidatos kirchneristas.

Con el resultado a su favor, el candidato del PRO evitó la confrontación y enfocó su campaña en la gestión macrista. En el difícil lugar socio del macrismo a nivel nacional y adversario en el plano local, Lousteau transitó una estrecha cornisa diciendo que seguiría con lo que se hizo bien y mejoraría lo malo. Recalde apuntó a poner en evidencia que en la ciudad, como en el país, hay dos modelos en disputa: el que encabeza Macri y el que puso en marcha en el 2003 el Frente para la Victoria. El candidato del PRO hizo su cierre de campaña en Parque Centenario de la mano del líder de ese espacio. El titular de Aerolíneas Argentinas hizo el suyo junto a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en la Villa 20, en Lugano.

Puede que para saber quién será jefe de Gobierno haya que esperar a la segunda vuelta, prevista para dentro de dos semanas, pero lo que quedará definido hoy será la integración de la Legislatura a partir del próximo 10 de diciembre. De las 30 bancas que se renuevan, el PRO pone en juego las 16 que consiguió en 2011, cuando sacó casi el 45 por ciento de los votos, el mayor caudal electoral de su historia. El Frente para la Victoria, junto a sus aliados, tiene 17 bancas y pondrá en juego 10.

Para la Legislatura habrá seis listas; o sea, una más que para jefe de Gobierno. La que se suma es la de Camino Popular, que en esa categoría consiguió pasar el filtro del 1,5 por ciento votos en las primarias que no superó, en cambio, su precandidato a la Jefatura de Gobierno, Claudio Lozano. A la cabeza de la boleta de Camino Popular va el economista Itai Hagman, seguido por Fabio Basteiro.

Al llegar a la última pantalla de votación, si es que no optan por elegir lista completa donde las tres categorías a elegir aparecen juntas, los porteños deberán optar por sus candidatos a integrar las Juntas Comunales. Se trata de los órganos de gobierno de cada una de las 15 comunas en que está dividida la ciudad. Cada junta tiene siete miembros, se integra de manera proporcional a los votos que obtiene cada lista y es presidida por el primer candidato de la boleta que resulta más votada. En las primarias el PRO ganó en todas las comunas.