El precandidato presidencial del PRO dentro del frente Cambiemos, Mauricio Macri, recorrió ayer varias localidades de la provincia de Buenos Aires tratando de instalar a su postulante a gobernadora, María Eugenia Vidal, y de alimentar sus propias pretensiones de llegar a la Casa Rosada. Mientras combina la campaña junto a Horacio Rodríguez Larreta en Capital Federal y las caminatas por tierra bonaerense, Macri realizó timbreos junto a su vice, Gabriela Michetti, y Vidal, a los que se sumó el primer candidato a diputado nacional, Fernando Niembro. En Rafael Castillo, partido de La Matanza, insistió con su latiguillo de “un gobierno cerca de la gente” y con la idea del “cambio”. “Llegó la hora de que seamos los protagonistas de nuestro futuro y trabajemos todos juntos con un gobierno que dialogue, arme equipos, rinda cuentas y que si se equivoca, tenga la humildad de pedir disculpas y corregir”, afirmó.