“Hoy empiezo a ser candidata a presidenta con la certeza del triunfo de Cambiemos en octubre para recuperar la República en diciembre. Vamos a tener una avalancha de votos”, pronosticó ayer la líder de la Coalición Cívica, que aprovechó el 9 de Julio para anunciar el inicio de su campaña electoral de cara a las primarias del 9 de agosto. Deberá competir con el titular de la UCR, Ernesto Sanz, y con jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, sus dos aliados políticos. En un almuerzo, la chaqueña aludió al escenario nacional, vaticinó el triunfo de “la República”, criticó a la Presidenta y a Daniel Scioli y evitó referencias al ballottage porteño que se disputará el 19 de julio. Sin embargo, fiel a su estilo, deslizó un dardo para su propio candidato, Martín Lousteau, a quien dijo que va a votar. Pidió que se investigue “de dónde sale la plata para tantos carteles” del ex ministro de Economía.

Recién salida de la clínica de Recoleta donde estuvo internada por una baja de potasio, Elisa Carrió volvió al ruedo para meterse de lleno en la elección nacional. Organizó un almuerzo con motivo del Día de la Independencia, al que asistieron unos 500 comensales. Abonaron 250 pesos el cubierto, que serán utilizados para la campaña. Bastante lejos de los más de 100 millones de pesos que consiguió recaudar el PRO en una cena con empresarios. “Vamos a emprender esta campaña al revés de la historia: en un mes y sin dinero. Si ganamos sin dinero haremos la revolución de la paz”, indicó la diputada, que no se privó de su habitual misticismo. Llamó a sus simpatizantes a “caminar sin miedo y dejar atrás los dolores y entregarlos a la Cruz de Cristo, a Buda, a la humanidad”. Para la chaqueña, en esta elección “no hay lugar para el gatopardismo”. “En octubre es a cara o cruz: o es la República y los valores, o es el narcotráfico y los negocios”, completó.

El acto fue en el Palacio San Miguel, uno de los salones porteños que suele utilizar la Coalición Cívica. Allí estuvieron presentes sus primeros candidatos a diputados por capital y provincia de Buenos Aires, Hernán Reyes y Marcela Campagnoli. Ellos también hicieron uso de la palabra, igual que la candidata al Parlasur, Mariana Zuvic. Reyes y Campagnoli deberán competir con otras listas de Cambiemos en las PASO. En CABA, la disputa será con la UCR, que lleva a Mariano Genovesi, y con Patricia Bullrich, que en 2011 había sido la primera candidata de la CC y ahora es la primera candidata del PRO. En tierra bonaerense, en cambio, UCR y el PRO van juntos: la nómina la lidera el periodista deportivo macrista Fernando Niembro. El candidato a vicepresidente, Héctor “Toty” Flores, mandó un video porque se encontraba de viaje.

La líder de la CC adelantó que ahora partirá rumbo al norte para recorrer el país y que sólo va a hacer un alto en su campaña para asistir a la sesión del miércoles y luego votar en el ballottage el domingo siguiente. Poco antes de la elección porteña Carrió se había molestado y en una entrevista aseguró que Lousteau no era su candidato. De cara a la segunda vuelta, a diferencia de Ernesto Sanz, evitó salir a apoyarlo frente a las presiones para que bajara su postulación. Ayer reconoció que igual lo va a votar, pero que se dedicará a la campaña nacional. En el entorno de la chaqueña admitieron que su molestia era porque el economista no le expresó el mismo apoyo que ella le había brindado al inicio de su campaña y, además, porque con su postulación le genera cortocircuitos con el macrismo a nivel nacional. Más allá de esto, ayer expresó que ella es la “garante” del acuerdo con el líder del PRO y con la UCR.

Luego de emparentar al peronismo con el narcotráfico, como viene haciendo hace rato, Carrió apuntó contra el gobernador bonaerense y precandidato del FpV: “Donde algunos ven el triunfo de Scioli y el PJ yo veo el cajón de Herminio Iglesias”, aseguró.

Con el mismo tono se expresó Campagnoli, hermana del fiscal José María Campagnoli. “Queremos ganar la interna en agosto y recuperar la democracia en diciembre”, dijo y consideró que “el PJ nos propone para el país el modelo de abandono y saqueo que ha llevado Scioli a la provincia”.

Reyes, que en 2011 había quedado afuera de la lista para darle lugar a Bullrich, ahora competirá contra la ex ministra de la Alianza. “Hemos crecido como nunca en la historia en estos doce años, pero no se ven las cloacas, ni las rutas, ni el crecimiento del empleo, ni de la industria, ni el florecimiento de las pymes”, sostuvo el dirigente y hermano de la ex diputada Fernanda Reyes.