El pedido para que alguna de las vacantes del máximo tribunal de Justicia sea cubierta por una mujer comenzó ayer a tomar impulso con iniciativas de oficialistas y opositores. La senadora de la Coalición Cívica Magdalena Odarda adelantó que presentará en la Cámara alta un proyecto para “que se apruebe una ley para determinar la igualdad real para la Corte Suprema”, al tiempo que legisladores del Frente Renovador, encabezados por Malena Galmarini, la mujer de Sergio Massa, presentaron en el Ministerio de Justicia un escrito con el mismo reclamo.

“Mientras no haya equivalencia de género, las vacantes deberán ser cubiertas por mujeres”, consideró Odarda, senadora de la Coalición Cívica, partido que integra la alianza gobernante Cambiemos. Como justificación del proyecto que presentará, la neuquina explicó que “la Constitución obliga a legislar y promover medidas que garanticen la igualdad de oportunidades, de trato y pleno goce y ejercicio de todos los derechos reconocidos en los Tratados Internacionales de Derechos Humanos, en particular respecto de niños, mujeres, ancianos y personas con discapacidad”.

En el mismo sentido, desde el Frente Renovador llevaron ayer un escrito al Ministerio de Justicia en el que solicitan que “al menos uno de los dos lugares que quedaron vacantes en la Corte sea ocupado por una mujer”. Luego de la presentación, Malena Galmarini, dijo que la iniciativa “no es en contra de ninguno de los dos nominados por el presidente Mauricio Macri, quienes gozan de un excelente currículum”, pero alegó que “la normativa habla claramente de la diversidad de género”. “Si van a ser cinco los miembros del tribunal, nos parece injusto que haya una sola mujer”, consideró.

La representante massista en el Parlasur Fernanda Gil Lozano también señaló la necesidad de que haya otra mujer en el máximo tribunal además de Elena Highton de Nolasco, sobre todo teniendo en cuenta que en la Argentina “cada 30 horas matan a una mujer”. La diputada nacional Liliana Schwindt se sumó al reclamo y aclaró que ya pedían la presencia de una mujer en la Corte cuando la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner propuso a Roberto Carlés. Según su argumentación, el nombramiento de una mujer, además de encuadrar en los marcos legales, “permitirá reflejar la diversidad de género y otorgar al más alto tribunal del país una mirada representativa de las diferentes problemáticas que atraviesan las mujeres”.