EL PAíS
› EL OPOSITOR A RODRIGUEZ SAA ACUDIO A LA JUSTICIA
Los intendentes, en otro ring
“El gobernador bloqueó los fondos de coparticipación, el Poder Judicial nos impide disponer de las cuentas del Municipio y la Legislatura habilitó el funcionamiento de una intendencia paralela.” Daniel Pérsico, el opositor político de los hermanos Rodríguez Saá que está en el centro de la disputa que mantiene a la capital de San Luis con dos intendentes a la vez, no utiliza metáforas al denunciar que el gobierno provincial lo está “acorralando” para que abandone el palacio comunal. “Los tres poderes tratan de que nos rindamos, pero vamos a resistir hasta las últimas consecuencias”, explicó Pérsico a Página/12.
En San Luis nada marcha por el cauce normal desde el 9 de noviembre, cuando Pérsico (Concertación Popular) fue elegido intendente en comicios que no fueron convalidados por la Justicia Electoral provincial, y dos semanas después, la oficialista María Angélica Torrontegui fue votada para el mismo cargo en una nueva elección. El producto de esa superposición fue, además de un poder bicéfalo, una lucha política en la que el gobernador Alberto Rodríguez Saá y su hermano, el diputado Adolfo, no dudan en utilizar todo su poder en la provincia.
“Agotamos todas las instancias de resolución del conflicto en San Luis”, explicó ayer Pérsico, luego de presentar un escrito en los Tribunales porteños para solicitar la intervención de la Corte Suprema de Justicia. El rival de los Rodríguez Saá contó con el patrocinio del abogado Ricardo Monner Sans. “La Corte debe decir que en la Argentina existe la plena autonomía municipal y que no le corresponde al Poder Judicial anular una carta orgánica, como sucedió en este caso”, fue el pedido.
“No sólo –dijo Pérsico– el gobierno nos ha bloqueado el acceso a los fondos coparticipables sino que el Poder Judicial determinó, además, la inhibición de todos los bienes municipales e impide que accedamos a las cuentas bancarias del Municipio, y el Poder Legislativo provincial habilitó a Torrontegui para que instale su gobierno en la Legislatura”.
En medio de este conflicto, la población puntana vive en un escenario de incertidumbre, con dos jefes comunales, dos concejos deliberantes y sin saber dónde pagar impuestos. Los empleados municipales ignoran también a dónde ir a trabajar, y quién va a pagar los sueldos.
“Esto puede durar lo que podamos resistir, y si caemos va a ser un problema: la gente está harta del manejo de los Rodríguez Saá”, fue el pronóstico de Pérsico.