El Espacio Memoria y Derechos Humanos que funciona en la ex ESMA debió ser desalojado ayer, por tercera vez en la semana, luego de un llamado anónimo que alertó sobre la presencia de un explosivo en el predio. Desde la Secretaría de Derechos Humanos explicaron que se trata de la décima amenaza similar en lo que va del año. “Abruptamente se termina tu programa por una amenaza, mientras al lado se despide trabajadores y se sigue boicoteando medidas de lucha. Dentro de un rato había asamblea de trabajadores. Justo ahora cayó la amenaza de bomba”, fueron las palabras de despedida de los conductores de Radio La Imposible, que funciona en la Casa de la Militancia de H.I.J.O.S., antes de dejar el aire.

En el espacio que supo ser sede del mayor centro clandestino de la Armada, recuperado para la sociedad en 2004, funcionan museos, centros culturales, organismos de derechos humanos y organizaciones estatales como el Archivo Nacional de la Memoria o la propia Secretaría. Las amenazas se producen a partir de llamados a distintos internos, a la recepción y hasta hubo un caso alertado al 911 de la policía bonaerense. La de ayer obligó a evacuar el predio a las 11 de la mañana y recién a las 14.30 se pudieron retomar las actividades. El rastrillaje con perros de la Brigada de Explosivos de la Policía Federal no arrojó ningún resultado positivo. La causa quedó radicada en el juzgado federal a cargo de Luis Rodríguez.

“Están atentando contra el normal funcionamiento de todas las instituciones y organizaciones que desarrollan sus actividades en el predio en el que trabajan mil personas por día y que es lugar de visita para alumnos y turistas”, informaron desde la secretaría. “Hoy teníamos chicos de tres colegios en el Museo Malvinas que tuvieron que ser evacuados”, señalaron. Explicaron que en cada ocasión se realiza la denuncia correspondiente ante la fiscalía de turno y que el secretario Claudio Avruj se reunió con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, para trabajar sobre un protocolo de seguridad.

“Las llamadas son cortas y caen en los teléfonos de cualquiera de los edificios o directamente al 911”, añadieron. Aseguraron que las amenazas no incluyen expresiones o manifiestos políticos explícitos sino que se restringen a la amenaza de bomba. “El mal que le quieren hacer no sé a quién se convierte en algo rutinario que le hace mal a la gente que trabaja y transita por el predio”, dijo un funcionario de la secretaría.

“Tenemos que dejar el aire en vivo de La Imposible”, anunciaron desde la radio que funciona en el ex predio de la Armada. “Ya es insoportable, insostenible, y tenemos que responder al protocolo de evacuación”, explicaron. “La verdad, nos hartamos. Es una radio, queremos comunicar, queremos seguir defendiendo el derecho a la información, y una amenaza más (perdimos la cuenta, ya se nos acabaron las manos) nos saca del aire”, dijeron. “Abruptamente se termina tu programa por amenazas mientras al lado se despide trabajadores y se sigue justamente boicoteando medidas de lucha. Dentro de un rato había asamblea de trabajadores. justo ahora cayó la amenaza de bomba”, fueron las últimas palabras.