Tras el decreto de la gobernadora María Eugenia Vidal, que pone bajo amenaza de despido a 10 mil empleados públicos, los trabajadores de ATE bonaerense realizaron el primer día de un paro de 48 horas. Las protestas incluyeron un intento de corte de la autopista Riccheri, frente al aeropuerto de Ezeiza. El malestar de los estatales de la provincia tiene varios motivos, entre ellos el haber recibido un aumento del 15 por ciento, por debajo de la pérdida del poder adquisitivo de los salarios. Durante la jornada, un juez ordenó a la gobernación que devuelva los días descontados por paro a los auxiliares de la educación, que habían sufrido descuentos de hasta 6 mil pesos.

La protesta en la Riccheri tuvo como respuesta el despliegue de un operativo con gendarmes y la Policía Federal, por lo que los manifestantes decidieron instalarse sobre la banquina con una carpa, donde permanecían hasta el cierre de esta edición, con la idea de pasar la noche en el lugar. El corte sobre la autopista fue organizado por trabajadores del Senasa (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) enrolados en ATE, con el reclamo de la apertura de su paritaria y un aumento salarial del 40 por ciento. También hubo permanencias en hospitales públicos y tomas de consejos escolares.

“La medida de fuerza en la provincia está siendo masiva y manifiesta el repudio generalizado de los estatales a las medidas generadas por la gobernadora Vidal, y en especial de los auxiliares de la educación, que reclamaron en la mayoría de los consejos escolares.”

“Esperamos que la contundencia de la medida los haga reflexionar convocando a paritarias para resolver el salario que los trabajadores nos merecemos, y garantizando la continuidad laboral de miles de temporarios con el pase a planta permanente, que será un acto de justicia luego de años de precarización en el estado bonaerense”, señaló el titular de ATE provincial, Oscar de Isasi.

A su vez, ATE nacional le puso fecha a un próximo paro en todo el país, contra la política de despidos que ya dejó en la calle a 30 mil empleados públicos. Será una huelga nacional por 24 horas el martes 19 de abril e incluirá una movilización a la Plaza de Mayo.

El día anterior al paro se instalará frente al Congreso una carpa con jubilados por el 82 por ciento móvil y contra la reducción de los medicamentos gratuitos hecha por el PAMI. “El Gobierno desprecia absolutamente a los trabajadores. Está claro que no quiere discutir seriamente cómo mejorar el Estado sino, a hachazos, acomodarlo según su interés”, advirtió el titular de ATE, Hugo Godoy. “Está despidiendo trabajadores con veinte años de antigüedad que hacían sus tareas normalmente, y al mismo tiempo contrata a su gente con cargos jerárquicos y sueldos de 40, 50 ó 60 mil pesos.”