EL PAíS
› A PESAR DE LA FRACTURA, MENEM DEBERA PRESENTARSE ANTE OYARBIDE
Con la “espiroidea” ante el juez
Menem alegó que tiene una “fractura espiroidea” que le impide viajar a Buenos Aires para presentarse ante el juez. Tanto Oyarbide como Urso desestimaron los intentos menemistas para evadir las citaciones judiciales y volvieron a convocarlo.
Quiera o no, Carlos Menem tiene cita para hoy con el juez federal Norberto Oyarbide. Así lo ratificó ayer el magistrado, al rechazar el último planteo que realizó su defensa en un intento por conseguir la suspensión de la declaración indagatoria en la causa que se le sigue por omisión maliciosa de bienes. Sin embargo, hasta anoche todo hacía suponer que el ex presidente no daría la cara ante Oyarbide, quien ya resolvió que en ese caso fijará una nueva audiencia y, si también falta, lo mandará a buscar con la fuerza pública. Menem, en cambio, no tendrá una segunda oportunidad con el juez federal Jorge Urso, quien lo convocó a su juzgado el próximo jueves bajo apercibimiento de declararlo en rebeldía.
Oyarbide dejó en firme la indagatoria a Menem y desestimó de ese modo un pedido de último momento de los abogados del ex mandatario para aplazar esa diligencia judicial. La presentación en ese sentido la realizó Alejandro Novak, quien planteó la nulidad de la pericia médica que el viernes pasado dictaminó que la fractura que Menem sufrió en su brazo no le impedía viajar de Chile a Buenos Aires a declarar.
El escrito de siete carillas que el abogado de Menem dejó en el juzgado de Oyarbide sostiene que “la única forma de demostración de las lesiones” que tiene el ex presidente “es la pericia realizada a través del examen directo del lesionado”. La defensa de Menem acompañó la presentación con un diagnóstico de Alfredo Achával, un médico legista y un psiquiatra al que recurrió en su intento por aplazar la indagatoria.
En pos de ese objetivo, Achával afirmó que “la fractura espiroidea”, que sufrió Menem en enero pasado mientras jugaba golf “no está consolidada, hay ligero cabalgamiento en su margen medial y desplazamiento hacia el lateral del fragmento distal”. El médico se remitió a constancias de su colega Mauricio Wainer Elizalde, de la clínica Los Condes de Chile, y agregó que esa lesión presenta “riesgos de realizar un viaje en avión”.
Cuanto menos, los argumentos a los que Achával recurrió para fundamentar esa afirmación resultaron curiosos. Entre otras cosas señaló que en su condición Menem tendría inconvenientes para “los desplazamientos del asiento” e “imposibilidad de manejar el cinturón de seguridad”, así como problemas con “el autoauxilio que significa la necesidad del uso de oxígeno por despresurización”, “dificultades de comidas y bebidas” y “dependencia de otra persona”.
En su afán por justificar la negativa de Menem a presentarse ante la Justicia, el legista hasta incursionó en las secuelas psíquicas que tendría su eventual viaje desde Chile a Buenos Aires: “Desde el punto de vista psíquico –precisó– debe tenerse en cuenta que si una persona tiene prestigio público, la portación de una silla de ruedas es traumática ya que no se trata de un palanquín chino, sino una dificultad de desplazamiento que para ciertas personas de prestigio inferioriza”. Más que curioso, ese argumento de Achával sonó discriminatorio.
Apenas conocida la decisión de Oyarbide, tanto Novak como Oscar Salvi –el otro defensor de Menem–, tomaron un avión a Chile para reunirse con Menem y coordinar una estrategia judicial. El ex presidente también debe presentarse a indagatoria el próximo jueves con Urso en la causa que investiga el supuesto pago de sobreprecios en la construcción de las cárceles de Ezeiza y Marcos Paz. Como en su momento ya faltó a una audiencia fijada con ese objetivo, si falta nuevamente el juez podría dictar su orden de captura internacional para forzarlo a declarar.
Hasta ahora los defensores de Menem no tuvieron mayor éxito en sus intentos por aplazar los llamados a indagatoria de su cliente, pero siguen buscado variantes. El mismo Novak aprovechó ayer su paso por los tribunales federales de Comodoro Py para dejar el planteo en el juzgado de Oyarbide y presentó también un pedido para que sean unificadas todas las causas que el ex presidente tiene pendientes en la Justicia Federal. Fuentes del juzgado a cargo de Urso dejaron trascender que el magistrado no tiene ninguna intención de desprenderse del expediente que tiene en su poder y que rechazará esa solicitud. Menem acumula tres causas en Comodoro Py: la de Oyarbide, por omisión maliciosa, lavado de dinero y falsedad ideológica; la de Urso por el presunto pago de sobreprecios en la construcción de las cárceles de Ezeiza y Marcos Paz y otra que tramita el juez Sergio Torres por abuso de autoridad en la cesión de terrenos en Parque Norte, donde está citado a indagatoria para mediados de año.
El ex presidente también tiene una causa en el fuero penal económico, aunque ésa no está incluida en el pedido de unificación: la de contrabando de armas a Croacia y Ecuador, a cargo del juez Julio Speroni.