EL PAíS
› CAEN UNA A UNA LAS CHICANAS DE CARLOS MENEM
Sin asilo para el fracturado
El ex presidente sigue dilatando su concurrencia a Comodoro Py. Ahora cambió de abogado. Pero Oyarbide y Urso irán por él. Para colmo, Chile anunció que no le dará asilo político.
› Por Irina Hauser
Carlos Menem se pegó el faltazo anunciado a la cita con el juez Norberto Oyarbide y nombró un nuevo abogado para lograr una postergación de la indagatoria que le había fijado Jorge Urso para este jueves bajo apercibimiento de declararlo rebelde y pedir su captura. Por lo pronto, no le será tan fácil escabullirse: ambos magistrados postergaron el ultimátum para la semana próxima y en los dos casos corre riesgo de quedar detenido si no se presenta. Para completar la racha y ante versiones de que el riojano podría pedir asilo político en Chile, la tierra natal de su flamante esposa, el gobierno del país vecino se adelantó a contestarle. “No corresponde”, dijo el secretario general de Gobierno, Francisco Vidal, “porque Argentina vive en un estado de derecho”.
Menem tenía que ir ayer al juzgado de Oyarbide para dar explicaciones sobre la omisión de bienes en su declaración jurada. Ya estaba procesado por no reconocer una cuenta en Suiza y esta vez debía contestar preguntas acerca de otras dos no blanqueadas en el Banco de La Rioja, dos aviones y acciones en Telefónica, aunque también se lo investiga por posible lavado de dinero. A pesar de que un informe de un perito del Cuerpo Médico Forense dijo que la fractura que tiene en el húmero no le impedía subirse a una avión y trasladarse a los tribunales porteños, el riojano no concurrió. El magistrado, entonces, lo conminó a que se presentara el 1º de abril y si vuelve a faltar pediría su captura nacional e internacional.
En otra causa, Urso había llamado a indagatoria a Menem para mañana como sospechoso en el pago de sobreprecios en la construcción de las cárceles de Ezeiza y Marcos Paz. Pero el ex presidente echó mano de un nuevo ardid: a último momento designó un nuevo abogado que le pidió a Su Señoría un tiempo extra para estudiar el expediente y, por ende, prorrogar el interrogatorio. En Tribunales la jugada fue interpretada sin vueltas como “una nueva maniobra dilatoria” y aseguran que el abogado Oscar Salvi es quien sigue manejando la batuta. Urso –el mismo juez que encarceló a Menem por la venta ilegal de armas– aceptó suspender la convocatoria pero pondrá una nueva audiencia. Todavía no estableció la fecha pero, según allegados a la causa, sería también la semana próxima y en las mismas condiciones previas: si se ausenta lo llevarán a declarar por la fuerza. Este magistrado se niega a la unificación de investigaciones pedida por la defensa.
El fin de semana pasado los abogados Salvi y Alejandro Novak, que escudan a Menem en la mayoría de sus pleitos, se reunieron con él del otro lado de la cordillera para limar estrategias. Si bien ambos letrados negaron que su defendido quiera pedir asilo político en Chile, donde está ahora con Cecilia Bolocco, las versiones en ese sentido fueron tan fuertes que las autoridades de ese país salieron a sentar posición. “La postura del gobierno chileno frente a esa hipótesis es no conceder asilo político en el entendido de que hay que dejar que operen los procedimientos judiciales de un país y otro”, dijo Vidal. “Sobre la base de que en Argentina hay un estado de derecho y no una dictadura, es que no corresponde entregar asilo político”, señaló el vocero. También aclaró que Menem aún no pidió nada y agregó que, si llegara a haber un pedido de captura internacional Chile “cumplirá la ley”.
El sainete sobre Menem-el-refugiado dio pie para comentarios. Cuando conoció el rumor del pedido de asilo, la senadora y primera ciudadana, Cristina Fernández de Kirchner, acotó: “Me parece una broma de mal gusto, casi de humor negro”. Asediada por micrófonos de la TV chilena dijo que “los asilos políticos se justifican en épocas de persecución, como cuando en la región asolaban las dictaduras militares”.
El médico legista Alfredo Achával, que elaboró uno de los informes que llevaron a la Justicia los abogados del riojano –y que Oyarbide rechazó–, salió ayer a defender la teoría de que no puede moverse con el brazo roto en una entrevista radial. El traslado del ex mandatario a Buenos Aires, dijo Achával, sólo podría hacerse “en un avión sanitario”. Para completarla ironizó: “Sería un excelente gesto si el presidente (Néstor Kirchner) le prestara el Tango 01”.
El juez Oyarbide, que rastrea posibles testaferros del ex presidente en su antiguo círculo cercano, había pedido a la Justicia en lo contencioso administrativo –en base a medidas impulsadas por el fiscal Carlos Stornelli– información sobre cuentas afectadas por el corralito que estuvieran a nombre de familiares de Menem. Ayer recibió algunos datos sobre depósitos de Zulemita, de la Fundación Carlos Menem hijo y de Munir Menem, entre otros. Son sólo piezas sueltas del enorme rompecabezas de la fortuna de Menem que quién sabe si algún día, por muchas veces que lo citen a indagatoria, podrá ser armado.