Dom 11.07.2004

EL PAíS

Los Gordos ofrecerán el hueso de la conducción

Los sindicalistas negocian furiosamente para el congreso que reunifique la CGT y parte del menú es ofrecerle espacios de poder a los disidentes. La idea parte de amigos de Daer. Moyano parece firme. El ángulo Barrionuevo.

Entre los mitos de la política, no todos veraces por cierto, se repite que los radicales son amantes de las roscas internas. Algo que también debería hacerse extensivo a sus socios del peronismo. Y si de internas peronistas se habla, qué no decir de las que ocurren dentro del movimiento sindical. A pocos días del congreso ordinario que se realizará en Obras Sanitarias para decidir la unificación de la CGT, el nombre de su futuro titular todavía tiene algunas negociaciones pendientes. Cuando todo indica que el camionero Hugo Moyano ocupará la secretaría general de la central, un grupo de gremios identificados con “los gordos” de Rodolfo Daer adelantó que el lunes propondrá a la conducción de la denominada CGT disidente un esquema de liderazgo compartido.
“No puede estar en juego la interna del justicialismo y mucho menos la elección de una conducción carente de proyecto y que permanentemente deberá demostrar con la fuerza de qué manera se diferencia de la gestión anterior”, dijeron a la agencia DyN referentes de esos gremios. También adelantaron que, de no arribar a un acuerdo, más de 10 gremios y sus respectivos congresales no concurrirán al congreso unificador.
El riguroso off the record se entiende. Para los sindicalistas de ambos sectores son días en los que tienen cosas en juego. Lugares de poder que ocupar en el futuro armado. Por ello suelen llamarse a silencio o intentan no dejar sus huellas en sus afirmaciones. Por lo pronto, a la mayoría los incordia la pelea entre Néstor Kirchner y Eduardo Duhalde. No quisieran tener que tomar partido en ella. Algo que conocen bien.
Uno que escapa a esa lógica es el gastronómico Luis Barrionuevo. Claro que en su caso se entiende. Raleado del poder político, aparecer como parte de la movida que pretende instalar a Moyano en el principal asiento de la CGT le da un aire de influyente que por estos días carece. “Todo marcha sobre ruedas y no hay ninguna posibilidad de revertir lo que ya está acordado”, afirma Barrionuevo para dar por hecho la nominación del camionero como futuro titular de la central gremial.
“Hay pleno acuerdo entre todos los sectores”, repite uno de los principales aliados de Moyano, el colectivero Juan Manuel Palacios. El destino y la búsqueda de consolidar un perfil disidente con la línea tradicional del sindicalismo los llevó a ambos a coincidir en 1994, en el Movimiento de Trabajadores Argentinos. Un nucleamiento crítico con las privatizaciones de Carlos Menem y con “los Gordos”, que fue el embrión de ruptura con la CGT.
“Si la conducción no recae en un gremio que haya demostrado su capacidad de movilización en la calle, no creo que haya unidad posible”, comenta a este diario un conocedor del entramado sindical, que no duda en señalar que esos gremios tendrían que ser algunos de los que se encolumnan con Moyano. Aunque lo de los Gordos no sea ganar la calle, eso no quiere decir que no tengan méritos para sumar puntos, aun con las peores cartas. La propuesta de una conducción colegiada es parte de esa movida. También lo es que uno de los suyos ocupe la secretaría adjunta de la central. Como viene reclamando el gremio de Sanidad, que conduce Carlos West Ocampo. El gremialista repite que ese lugar no es para él sino para la representante de su gremio en Santa Fe, Liliana Rueda.
Para reafirmar la elección del camionero como futuro titular de la CGT unificada, su compañero de la UTA, Palacios, dijo que “hasta el presidente Néstor Kir-
chner se comunicó con Moyano para felicitarlo por su nominación”. En el Gobierno niegan que Kirchner lo haya llamado. Aunque es público que el Presidente sintoniza mejor con Moyano que con Daer. No por casualidad en enero de este año el secretario del gremio de los camioneros dijo: “Kirchner y yo luchamos por lo mismo, en contra de la entrega del patrimonio nacional y de la política que realizó el menemismo”.
Más allá de esta afirmación, toda relación con Moyano tiene sus idas y vueltas. Formado en el gremialismo peronista y en la Juventud Sindical Peronista, Moyano como pocos cultiva el viejo estilo de pegar primero para negociar después que supo tener en el fallecido Augusto Timoteo Vandor el máximo exponente. Moyano supo criticar a Kirchner cuando se votó la derogación de la ley laboral, la ley de los sobornos en el Senado. Lo criticó por su acercamiento con los Gordos precisamente. Coincidentemente, hace pocos días, el 4 de julio en la embajada norteamericana, el mercantil Armando Cavalieri y West Ocampo, dos de los referentes de los Gordos, coincidieron en un abrazo con el ministro de Trabajo, Carlos Tomada. Por lo pronto las negociaciones para la futura unidad sindical continuarán el próximo lunes en la sede de UPCN, el gremio que conduce quien supo ser un abanderado del menemismo: Andrés Rodríguez. Más allá de los cargos, lo que hasta ahora no se explicitó es el perfil que tendrá la CGT. En principio, no son pocos los que quieren recuperar la calle y correr de ella a los piqueteros. “Esta forma de protestar de los piqueteros está agotada”, supo decir Moyano hace menos de un mes. Para prueba...

(Versión para móviles / versión de escritorio)

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS rss
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux