EL PAíS
A cuatro meses de ser condenado, el represor Bergés quedará libre
Fue condenado por la apropiación de una menor a siete años. Se benefició con el 2 x 1. Está acusado en otras causas.
› Por Victoria Ginzberg
A sólo cuatro meses de haber sido condenado por la apropiación de la joven Carmen Gallo Sanz a siete años de prisión, el represor Jorge Bergés recuperará hoy su libertad. Los mismos jueces que lo sentenciaron le concedieron la excarcelación. Dieron por cumplida su pena, ya que al computarla incluyeron el derogado beneficio del dos pos uno.
Los jueces del tribunal oral número 1 de La Plata Ana Aparicio y Nelson Jarazzo concedieron la libertad condicional a Bergés luego de un pedido de la defensora oficial. El tercer integrante, Carlos Rozansky, se opuso a la decisión de sus colegas. Lo mismo hicieron el fiscal Carlos Dulau Dumm y los abogados de las Abuelas de Plaza de Mayo y la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de La Plata. Ayer al mediodía, el represor supo que podría salir hoy.
“Es indignante que lo dejen en libertad después de los delitos que cometió”, dijo Adriana Calvo, una de las sobrevivientes que reconoció al médico torturador del Pozo de Banfield en el juicio que se realizó este año. La dirigente de la Asociación de Ex Detenidos-Desaparecidos aseguró que la liberación de Bergés le provoca temor y recordó que existen otros expedientes en trámite por los que el represor debería estar preso.
En marzo, el ex médico de la Policía Bonaerense fue condenado por haber firmado el acta falsa de nacimiento y entregado personalmente a un matrimonio de civiles a la hija de los desaparecidos Aída Sanz y Eduardo Gallo. La misma suerte corrió el ex comisario Miguel Osvaldo Etchecolatz, quien como director de Investigaciones de la Bonaerense fue responsable de los delitos que se cometieron en todos los centros clandestinos de detención que funcionaron en las brigadas de la provincia de Buenos Aires. Etchecolatz no saldrá en libertad ya que está detenido por orden del juez federal Rodolfo Canicoba Corral por otros casos de violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura. Bergés también está imputado en otros expedientes, pero, hasta ahora, aquéllos avanzaron más lentamente. Una de las causas por la que el represor podría volver en un corto plazo a la prisión es la desaparición de los padres de Carmen Gallo Sanz. La Asociación de Ex Detenidos-Desaparecidos le pidió en marzo al juez Arnaldo Corazza que indagara y arrestara por ese crimen a Bergés, pero la medida aún no se concretó. Bergés figura además como acusado en la causa sobre los crímenes cometidos en el Primer Cuerpo de Ejército. Allí está involucrado por los secuestros y las torturas realizadas en la brigada de San Justo. El expediente “Camps”, sobre los delitos de la Policía Bonaerense, también lo tiene como protagonista.
Bergés fue condenado a seis años de prisión en 1986, pero salió en libertad gracias a la Ley de Obediencia Debida. “Era un torturador implacable. Cuando me torturaban, él siempre estaba cerca. Uno lo veía siempre prolijo, con su guardapolvo blanco, y empezaba el miedo”, relató el periodista Jacobo Timerman ante la Justicia. “Creen que soy el doctor Menguele”, se definió a sí mismo Bergés en el Juicio a las Juntas.