Por primera vez desde que enfrenta la protesta piquetera, el Gobierno logró el levantamiento del corte de dos accesos a la Capital a través del diálogo con los representantes de los desocupados. La llave de la negociación, esgrimida por el ministro del Interior Aníbal Fernández, fue la creación de una comisión investigadora de las muertes de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán.
Los cortes iniciados bien temprano sobre los puentes Pueyrredón y Saavedra se convirtieron ayer en la primera muestra de ese tenor de la Corriente Clasista y Combativa y el Movimiento de Trabajadores Desocupados Aníbal Verón, agrupaciones que si bien no están consustanciadas con el Gobierno, tampoco pertenecen al sector “duro”.
El primer gesto de buena voluntad provino de los propios piqueteros, quienes –a pedido del Gobierno– impulsaron cortes restringidos, habilitando uno o dos carriles para el tránsito vehicular, según el caso. Se trató de una medida enmarcada en un plan de lucha de 24 horas, pero que, fruto de la negociación con la Casa Rosada, se redujo a sólo 4 horas.
“Estos grupos mostraron vocación de construir sobre la gente que dice representar”, se mostró entusiasta Fernández, según refrescaron a Página/12 fuentes del Gobierno.
La vocación dialoguista quedó reflejada en cada una de las declaraciones de los piqueteros. El propio Carlos Alderete, líder de la CCC, lo confirmó en un reportaje con el periodista Marcelo Longobardi. “Vamos a demostrar que nosotros apostamos al diálogo con el Gobierno. Yo creo que estamos en tiempos tormentosos y nosotros no queremos ser producto de llevar más tormenta a nuestro país”, señaló en la radio.
Además del no pago de la deuda externa y aumentos del salario mínimo y de las jubilaciones, la CCC y el MTD Aníbal Verón reclamaron por la recomposición de los planes sociales. No por nada en el encuentro que mantuvieron ayer con el Gobierno estuvieron, además de Fernández, representantes del Ministerio de Desarrollo Social, y también otro hombre de buen diálogo con los piqueteros, el secretario general de la Presidencia, Alberto Parrilli.
Alderete reconoció que su sector está accediendo al pedido oficial de activar cooperativas de trabajo para encontrar una salida genuina al problema de la desocupación. Pero quiere que a la producción que allí se realice se sumen los 150 pesos de los planes sociales. “Hay compañeros trabajando 9 horas que pueden sacar 250 pesos, más los 150 que cobraban del plan, oscilaban en los 400 pesos. Ahora, sacándoles los 150 pesos que ganaban del plan, quedan con 250 pesos...”
La organización de Alderete estuvo representada en Gobierno por Mariano Sánchez. Y el MTD-Aníbal Verón por Juan Cruz Daffuncchio. Fernández ya venía en contacto con estas organizaciones. Y ayer les propuso iniciar una ronda de conversaciones para llegar a algún punto de acuerdo y así evitar que la protesta se extienda por 24 horas.
“Si hay errores cometidos los vamos a revisar”, hizo su autocrítica el ministro, que parecía desplazado de la negociación después de aquella chicana al Movimiento Independiente de Jubilados y Pensionados de Raúl Castells con el altisonante “ven una pala y les agarra fiebre”. La realidad demostró que el presidente Néstor Kirchner le renovó el crédito para tan complicada tarea.
La curiosidad sobre el resultado de las negociaciones es que las palabras más auspiciosas surgieron de boca de los dirigentes de desocupados, mientras que los funcionarios oficiales prefirieron mantener el bajo perfil. “Se avanzó en un 80 por ciento de los reclamos, como revisar la restitución de los planes sociales caídos y la conformación de una comisión investigadora de los crímenes de los piqueteros Maximiliano Kosteki y Darío Santillán”, ocurridos durante la presidencia de Eduardo Duhalde. Esa comisión ya había sido reclamada personalmente a Kirchner por el padre de Santillán. Fue el año pasado y logró el respaldo de la gran mayoría de las agrupaciones de desocupados. Hasta ayer, la posibilidad de dar luz verde a una comisión era una mera promesa. Ahora, fuentes oficiales le aseguraron a la CCC y al MTD-Aníbal Verón que se lanzaría el próximo 26 de septiembre.
Según informaron en la Casa Rosada, la comisión será amplia y no pasará por encima sino que colaborará con el poder jurisdiccional, de tal manera de aportar elementos y pruebas. Los piqueteros se llevaron la propuesta a su casa y se comprometieron en las próximas horas a estudiarla. Por el semblante que ofrecieron tras el encuentro con Fernández, en la Casa Rosada intuían su pronta aceptación.